En los últimos años, el colectivo LGTBQ+ por fin ha comenzado a verse reflejado en pantalla y cada vez son más las series y películas que crean referentes para estas personas, permitiendo incluso que puedan contar sus propias historias. El contenido audiovisual cada vez se parece más a la realidad que representa y el último ejemplo de ello ha sido The Last of Us, que en su tercer episodio ha contado una de las historias de amor más bonitas que se han visto recientemente.
Sin embargo, esto parece ser un problema para el sector más intolerante de la sociedad y para algunos espectadores que, en este caso, han llegado a bombardear con críticas negativas al capítulo, solo por el hecho de que desvía parcialmente la trama principal para incluir a una pareja de dos hombres en el centro de la misma.
El tercer capítulo, titulado Mucho, mucho tiempo, gira en torno a la relación de 20 años que surge entre el solitario y reprimido Bill (Nick Offerman) y el extrovertido Frank (Murray Bartlett). Su relación no será fácil, porque ambos se encuentran en medio del fin del mundo, y porque la paranoia conspiradora de Bill y el optimismo perpetuo de Frank no siempre son compatibles.
Pero ambos harán que funcione, porque para ellos es posible, incluso aunque el fin del mundo tenga lugar más allá de los muros que han construido alrededor de su casa.
No es un caso aislado
Con respecto al resto de episodios, el tercero de la serie actualmente ostenta la calificación de IMDb más baja, con más de 29.000 opiniones de usuarios calificándolo con una sola estrella -de diez-. Teniendo en cuenta que más de 101.000 usuarios llegaron a puntuarlo, es un hecho que la homofobia ha hecho mella y que los trols de internet quisieron sabotear el éxito de la serie.
Sin embargo, a esto han respondido otros 52.000 usuarios de la misma web, intentando contrarrestar el odio calificándolo con 10 estrellas. Esto puede parecer algo inofensivo y que no hace daño a nadie, ya que solo son opiniones de una serie en una web, pero no debería pasarse por alto, porque no deja de ser un reflejo de la forma de pensar que tienen muchos de los espectadores, y de una pandemia como la homofobia, igual de destructora que la que causó el Cordyceps.
El sentido de la esperanza, incluso en el peor momento
Dirigido por Peter Hoar, autor de It's a Sin -una de las mejores series recientes con temática LGTBQ+-, el tercer episodio ha calado más por su buena acogida, donde se ha destacado especialmente el sentido de la esperanza como tema central, y la importancia de aferrarse a ella, incluso en los peores momentos.
Aunque apenas haya comenzado el 2023 y el avance se esté logrando a pasos agigantados en favor de la diversidad, hoy en día sigue siendo aterrador ser queer para muchas personas. Por eso mismo, es necesario que existan capítulos como el tercero de The Last of Us, capaz de contar que siempre tendrán su sitio en pantalla, incluso en medio de un apocalipsis.