A falta de dos episodios para el final de Succession, la serie de HBO Max ha dedicado el de esta semana a explorar la relación de los medios de comunicación y la política. Concretamente, el poder que puede tener ATN, el canal informativo propiedad de Waystar Royco, a la hora de moldear la percepción de la opinión pública.
America Decide transcurre en la noche de las elecciones presidenciales, en las que Jeryd Mencken, el candidato republicano de la (ultra)derecha, se enfrenta a Daniel Jimenez, el candidato demócrata. Mientras tanto, los hermanos Roy toman decisiones que ponen en peligro la democracia y el futuro de un país, basándose solamente en sus intereses personales y lo que cada uno quiere para el futuro del imperio fundado por su padre.
Durante el episodio se van haciendo las proyecciones de los estados en los que ganaría cada uno de los dos candidatos según las encuestas, que el día anterior daban como ganador al demócrata, hasta que un punto de inflexión decisivo, llega la noticia de que en Wisconsin ha habido un incidente en el que 100.000 votos emitidos han sido quemados.
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La decisión de ATN
El dilema que se plantea es si ATN puede declarar un ganador en ese estado. Según la información que le ha dado el equipo de Mencken, Roman dice que el ganador de esos votos electorales es el republicano; aunque por tradición Wisconsin tiende a votar al partido demócrata.
Con Darwin, jefe de la mesa de decisión de ATN, negocian que lo prudente sería explicar a la opinión pública la proyección actual y la tendencia de voto, pero aclarando que el resultado quedaría "pendiente" hasta que legalmente se decida cuál será el protocolo a seguir, porque no hay precedentes.
Finalmente, tal como quería Roman, y por la rabieta de Kendall al descubrir que Shiv había estado colaborando de forma clandestina con Matsson (y aunque sabe que está poniendo en peligro a su hija), cuando el resto de medios le conceden la victoria a Mencken en Arizona, ATN decide mantener su previsión en Wisconsin y anunciar que ha ganado las elecciones.
Esto le permitió al neofascista hacer un discurso como futuro presidente de los Estados Unidos, ya que tenía la validación de un medio de comunicación relevante que le dio la victoria. Y, aunque insista en lavarse las manos al decirle a Kendall y Roman que la decisión es suya, Tom, como presidente de la cadena, es el máximo responsable y probablemente se enfrentará a repercusiones cuando la ley siga su curso.
Ese es el resumen general de lo ocurrido con esta trama. Sin embargo, entre algunos espectadores han surgido dudas razonables, porque se preguntan qué más da lo que diga ATN si un medio de comunicación no es quien elige al presidente, y solo están haciendo "fake news".
Estas dudas minimizan el impacto que puede tener esta decisión y hace que resulte confuso por qué los Roy se comportan como si tuvieran el futuro de la democracia en sus manos. Lo hacen porque realmente lo tienen.
El papel de los medios
Si bien es el Colegio electoral quien nombra al presidente electo en los Estados Unidos, los medios de comunicación son quienes hacen las proyecciones de los estados en los que ganaría cada candidato en la noche de las elecciones.
Hay que tener en cuenta que al ser un territorio con más de 300 millones de habitantes, contar los votos totales de cada estado requiere de mucho más tiempo del que estamos acostumbrados en otros países. Por ejemplo, en las elecciones de 2020, convocadas el 3 de noviembre, cada estado tuvo plazo hasta el 8 de diciembre, más de un mes después, para certificar sus resultados.
En la noche de las elecciones, los grandes medios informativos confían en sus "mesas de decisión" para seguir las encuestas individuales y recopilar recuentos de votos brutos que les permiten obtener una imagen bastante precisa de hacia dónde se inclinará el voto en cada estado. Cuando las cifras indican una mayoría para un candidato o muestran que el otro no tiene posibilidades de remontar, el primero se declara vencedor.
Esta previsión es posible debido a que allí en todos los estados (con excepción de Nebraska y Maine) -y a diferencia de España donde se usa el método D'Hondt para asignar los escaños de las listas - al candidato más votado se le otorgan todos los votos electorales correspondientes al estado en cuestión, aunque solo supere a su rival por un voto. Hay 538 compromisarios en total, por lo que un candidato necesita al menos 270 votos electorales (la mitad más 1) para ser elegido.
Y la previsión habitualmente es correcta porque, a diferencia de ATN en el episodio, en la realidad cada medio intenta ser lo más preciso posible para proteger su integridad y reputación.
Sin embargo, no son infalibles. El caso más famoso ocurrió en el año 2000, cuando la gran mayoría de los medios de comunicación declararon a Al Gore como vencedor en Florida, pero George W. Bush ganó después en el recuento. Desde entonces, y una vez más, a diferencia de ATN, los medios priorizan la credibilidad en lugar de la rapidez, para evitar tener que retractarse y garantizar que la audiencia confíe en ellos para seguir los resultados en las siguientes elecciones.
También para evitar ser expulsados de la NEP, la National Election Pool (NEP), que le menciona Pam a Tom en el episodio, un consorcio de medios de comunicación estadounidenses creado en 2003 para proporcionar información sobre los sondeos a pie de urna de las elecciones que permiten hacer estas proyecciones.
¿Qué importancia tiene lo de ATN?
Hay una escena del episodio que encapsula de forma muy elocuente el impacto que puede tener el anuncio de ATN, aunque no sea un medio quien decida oficialmente quién será el nuevo presidente de Estados Unidos.
Cuando Roman va a visitar a Mencken a la suite de su cuartel general, el candidato le dice: "Si pierdo, quiero que esto se "caracterice" correctamente como una gran victoria para mí". Así, deja claro que lo único que realmente importa es la narrativa que se construya a su alrededor y la percepción que se deje en la audiencia; lo que últimamente hemos denominado posverdad.
Es la percepción que tenga la opinión pública de lo ocurrido, la que construirá la narrativa que será repetida una y otra vez por los políticos y los medios afines hasta que se convierta en la única verdad.
¿Recordáis el asalto al Capitolio de Estados Unidos del 6 de enero de 2021? Se produjo después de que Donald Trump se resistiera a aceptar la derrota en las elecciones y que insistiera en que se había cometido fraude.
Sus partidarios, incitados por su discurso incendiario, irrumpieron en la sede del Congreso violando la seguridad y ocupando partes del edificio durante varias horas. El suceso interrumpió una sesión conjunta del poder legislativo para contar el voto del Colegio Electoral y certificar la victoria de Joe Biden en las elecciones presidenciales.
Ese es el ejemplo más claro y realista de las consecuencias que podría dejar una acción como la de ATN, pues al validar el estado de Wisconsin para Mencken, cualquier medida legal que se tome a partir de ese momento para subsanar los votos emitidos y no contados será vista por los seguidores del republicano como fraude o un intento de robarle la presidencia.