En el último episodio de la primera temporada de La casa del dragón, Rhaenyra se despidió de sus dos hijos mayores, que partieron en sus dragones para confirmar las alianzas que necesita para reclamar el trono. Luke fue a Bastión de Tormentas, un viaje en el que encontró la muerte a manos de su tío Aemond a lomos de Vhagar, mientras Jace se dirigió al Norte para pedir el apoyo de la familia Stark.

La segunda temporada comienza en un escenario familiar para los fans de Juego de tronos que aún no se había visto en la precuela: el Muro de Invernalia. Una escena perfecta para retomar la acción, que continúa solo unos días después de los fatídicos hechos del final de la anterior.

En la escena, Jace habla con Lord Cregan Stark (Tom Taylor), jefe de la Casa Stark conocido como el Viejo del Norte, mientras suben en ascensor hasta la cima de la gran barrera de hielo de más de 200 metros, escoltada por la honorable Guardia de la Noche, que tiene la misión de mantener a la "muerte", a quien en el futuro se conocerá en Poniente como los Caminantes blancos.

Allí, Cregan Stark le contó cómo su padre llevó una vez al predecesor de Viserys, el rey Jaehaerys Targaryen, y a su reina, Alysanne, a ver el Muro, y observó cómo sus dragones se negaban a cruzarlo. Este relato cobrará un nuevo sentido para el príncipe si Rhaenyra decide compartir con él la profecía de Aegon el Conquistador.

Haciendo honor a su apellido y sus valores, Cregan acata el juramento que su padre, Lord Rickon Stark (David Hounslow), hizo al rey Viserys I en la primera temporada, cuando apoyó a Rhaenyra como legítima heredera. 

"Seguramente el gran Torrhen Stark habría muerto antes que doblar la rodilla", le dice Jace. "A menos que creyera que el Conquistador podría traer la unidad a los Siete Reinos".

Torrhen Stark es un antepasado de Cregan, que juró lealtad a Aegon I Targaryen cuando conquistó Poniente y estableció la dinastía Targaryen casi 130 años antes. También fue el último Stark que gobernó como Rey en el Norte antes de que Robb Stark reclamara el título tras la muerte de Ned Stark en Juego de Tronos.

Aunque su prioridad es custodiar el Muro, Cregan finalmente accede a comprometer a miles de soldados norteños apodados a la causa de Rhaenyra.

Quién es Cregan Stark

Lord Cregan Stark

Cregan fue el hijo mayor de Lord Rickon Stark y Lady Gilliane Glover. Tras la muerte de su padre en 121 d.C., Cregan se convirtió en Señor de Invernalia y Guardián del Norte a la edad de trece años.

Durante su minoría de edad, su tío Bennard Stark gobernó el Norte por él. Cuando Cregan cumplió dieciséis años y llegó a la mayoría de edad, Bennard tardó en cederle el poder, por ello la relación entre tío y sobrino se fue volviendo cada vez más tensa.

Lord Cregan Stark, conocido como el Viejo del Norte, fue cabeza de la Casa Stark y, como tal, Señor de Invernalia y Guardián del Norte durante los reinados de Viserys I, Aegon II y otros tres reyes cuyos nombres no revelaremos porque constituyen spoilers de la serie. 

Se casó con Lady Arra Norrey y el hijo menor de ambos, Brandon, se convertirá en su sucesor. A través de él, la línea de Cregan conducirá directamente a Ned Stark. También conducirá a Lyanna Stark, que se casa con Rhaegar Targaryen antes de dar a luz a Jon Nieve.

Cregan también tenía una hermana bastarda, Sara Nieve, de la que se desconoce la identidad de su madre en el libro y que probablemente tenga presencia más adelante en la serie.

'La llegada del Lobo' ©Ertaç Altinöz

Qué papel juega en la Danza de dragones

Cregan cumplirá su promesa y acabará desempeñando un papel importante en la Danza de los Dragones, pero muy probablemente no le volveremos a ver hasta la tercera temporada, pues los hechos que protagoniza se producirán en el año 131 d. C., es decir, dos años más tarde del presente de la narración. 

La razón por la que los Stark tienen tan poca presencia en este período histórico, además de que durante los períodos de paz no tenía motivos para visitar el Sur, es principalmente geográfica. Invernalia está bastante lejos de Desembarco del Rey y Rocadragón, lo que convierte cada visita en una odisea considerable pues no tienen dragones. En su lugar, dependen de los caballos y los barcos, y tardan semanas en hacer el viaje.

Aunque acabará siendo considerado uno de los Stark más importantes de la historia de Poniente, aún no se ha ganado ese título.