Y después de Dahmer, Charles Cullen: la truculenta historia real detrás de ‘El ángel de la muerte’
La película de Netflix se sitúa en el caso real de un enfermero que llegó a asesinar a más de 400 personas durante más de diez años.
26 octubre, 2022 17:43Netflix acaba de estrenar de tapadillo y sin apenas promoción El ángel de la muerte, un thriller basado en hechos reales que protagonizan Jessica Chastain y Eddie Redmayne. Está dirigido por Tobias Lindholm y será el nuevo true crime que llega a la plataforma, un género que suele tener bastante éxito y que agrupa en el catálogo a otros títulos como Monstruo: La historia de Jeffrey Dahmer.
La película también adapta en pantalla la novela de Charles Graeber, en la que se narra la historia de Amy, una enfermera y madre soltera que lidia con una grave enfermedad cardiaca y se encuentra al límite tanto físico como emocional debido a los exigentes turnos de noche que tiene que cubrir en su trabajo en la UCI.
Por suerte, pronto contará con la ayuda de Charlie, alguien atento y comprensivo que se incorpora a su unidad. Ambos forjan una sólida y leal amistad mientras comparten las largas noches de hospital y, por primera vez en muchos años, Amy tiene fe en su futuro y en el de sus hijas. Pero la misteriosa muerte de varios pacientes acabará señalando a Charlie como principal sospechoso.
El mal podría haber sido menor
En El ángel de la muerte se cuenta la historia real de Charlie Cullen, un enfermero que acabó convirtiéndose en uno de los asesinos en serie más prolíficos de la historia. También conocido como el "Ángel de la muerte", Cullen era un padre y marido que se ganaba la vida como cuidador en el hospital, pero que en secreto llegó a acabar con la vida de más de 400 personas a lo largo de 16 años.
La película de Netflix no solo se centra en el caso real de este asesino en serie, sino que además, pone el foco en el sistema sanitario de Estados Unidos, que llegó a permitir que una enfermera trabajara en esas condiciones teniendo que vivir con una enfermedad cardiaca grave y sin seguro médico.
También se muestra la gran cantidad de hospitales que hicieron la vista gorda ante el comportamiento de Cullen, que aunque finalmente se declaró culpable de los asesinatos de 29 pacientes, no llegó a reconocer que llegasen a ser más de 400 víctimas.
Según el director Tobias Lindholm, las motivaciones de Cullen, o la carencia de ellas, es lo menos relevante de la historia, porque para él "lo más aterrador es cómo se le permitió seguir haciéndolo" y llegar a "comprender que alguien pudiera haberle parado los pies y que no se hiciera por intereses económicos".
La historia real
El protagonista de la historia de ficción es Charles Cullen, que desde que nació en 1960, tuvo una infancia realmente solitaria y triste. Llegó a alistarse en el ejército, pero las constantes novatadas que sufría le llevaron a intentar suicidarse y optó por cambiar de camino y empezar a estudiar enfermería, que sería a lo que se dedicaría finalmente.
Pasó por varios centros médicos diferentes y sus crímenes empezaron a producirse desde que comenzó a ejercer como enfermero. Sus compañeros comentaban que tenía una actitud especialmente reservada y tranquila, y poco a poco fue ganando confianza en el gremio -y también empezó a sentirse cómodo asesinando a sus pacientes-.
Sus métodos eran poco sospechosos porque operaba en las unidades cardiovasculares y de cuidados intensivos, que a menudo se dedican a cuidar de pacientes que están gravemente enfermos o que se acercan al final de sus días, y durante la noche les suministraba dosis letales de digoxina, un medicamento para tratar afecciones cardiacas.
Llegaron a sospechar de que Cullen asesinara al menos a tres pacientes, pero nunca se abrió una investigación formal sobre su caso y siguió actuando de la misma manera durante años sin levantar más sospechas y sin consecuencias.
Sin embargo, Cullen acabó llamando la atención en el Somerset Medical Center. Un sistema que registra la medicación de los pacientes acabó sorprendiendo a la enfermera Amy Loughren, que se fijó en su expediente y acabó iniciando una investigación por el comportamiento sospechoso de Cullen, que hasta que fue detenido en 2003 llegó a acabar con la vida de cientos de personas durante más de quince años.
'El ángel de la muerte' ya está disponible en Netflix.