Netflix ha revelado que llegó a gastar 318,7 millones de dólares en la producción de las dos primeras temporadas de la serie The Witcher y en la miniserie y precuela El origen de la sangre. La primera de ellas gira en torno a Geralt de Rivia (Henry Cavill), un cazador de monstruos mutante que viaja en pos de su destino por un mundo turbulento donde, a menudo, los humanos son peores que las bestias.
La serie adapta la saga literaria del escritor polaco Andrzej Sapkowski, pero mucho antes de estrenarse en Netflix, ya había sido uno de los videojuegos más vendidos. El primero salió en 2007, pero la popularidad llegó con la tercera parte The Witcher 3: The Wild Hunt, que fue la que llevó a Netflix a dar luz verde a la serie de acción.
Desde que se estrenó en 2019, la serie ha compartido un éxito similar y es una de las ficciones estrella de la plataforma.
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Éxitos que regresan
Según la propia plataforma, 76 millones de hogares vieron al menos dos minutos de la primera temporada de The Witcher en sus primeras cuatro semanas en el catálogo. Este fue el estreno más visto de una serie original de Netflix, con 541 millones de horas vistas en sus primeros 28 días -y hasta que llegaron Los Bridgerton y El juego del calamar-.
De hecho, aún sigue siendo la novena producción en inglés más popular de la plataforma, y aunque su segunda temporada no fue tan popular, acumuló 484 millones de horas en sus primeras cuatro semanas.
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La serie regresará con una tercera temporada que se estrenará en dos partes: la primera el 29 de junio y la segunda el 27 de julio. Será la despedida de Henry Cavill como protagonista, dejándole así el relevo al australiano Liam Hemsworth.
Un caso aparte
Normalmente, los presupuestos de las series suelen guardarse en secreto y son las plataformas las encargadas de asumir el coste general. Sin embargo, en toda norma hay una excepción y en este caso son las productoras con sede en Gran Bretaña, como la que asumió el coste de las dos primeras temporadas de The Witcher y su precuela.
Fotograma de la temporada 2 de 'The Witcher'.
Las productoras británicas suelen ser muy transparentes en cuanto a los movimientos del presupuesto y se benefician del programa Television Tax Relief, que permite a los estudios reclamar un reembolso en efectivo de hasta el 25% del dinero que gastan en el país.
Al menos el 10% de los costes de la producción deben estar relacionados con actividades realizadas en Gran Bretaña y The Witcher superó este umbral gracias en parte a la firma de efectos visuales que salieron de la sede de Londres de Framestore.
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Además, pasó una prueba creada antes de que Gran Bretaña abandonara la Unión Europea, y también fue impulsada por los orígenes polacos del autor, incluso aunque se rodara fuera de Gran Bretaña.
Henry Cavill se despide
A lo largo de estos cuatro años, Henry Cavill ha confesado ser fan de los libros y juegos de The Witcher. Sin embargo, la tercera temporada será la última en la que le veremos interpretar a Geralt. Sobre esto, Anya Chalotra, que interpreta Yennefer de Vengerberg, habló recientemente con Entertainment Weekly diciendo que "es difícil de aceptar porque es una parte crucial de la serie y todos le adoran".
'The Witcher'.
En una entrevista reciente con Deadline, la directora de casting de la serie, Sophie Holland, dijo: "Estamos a punto de comenzar a filmar la cuarta temporada con Liam Hemsworth y habrá una pequeña brecha antes de pasar directamente a la quinta temporada".
El caso de la precuela
En diciembre, Netflix estrenó la precuela El origen de la sangre, protagonizada por Minnie Driver y Michelle Yeoh. Se ambientaba más de mil años antes de los eventos de la serie principal, y aunque no fue tan bien recibida como la serie original, sí que se asemeja a ella en el coste que tuvo como producción.
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La inversión total ascendió a 50,3 millones de dólares, sin incluir el coste de la postproducción, que comenzó en noviembre de 2021. Esto eleva el gasto total de Netflix por The Witcher a los 318,7 millones de dólares, una cifra que seguirá aumentando.
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