The Crown siempre se ha criticado de forma preventiva antes del estreno de cada temporada. Es una serie que se mira con lupa por parte de la crítica especializada, pero también de los tabloides. Su creador, Peter Morgan, dice que se critica mucho lo que cuenta y cómo, pero afirma que no se le da suficiente crédito por lo que deja fuera.
"Una vez hicimos una lista de todas las cosas que no habíamos puesto en la serie'", dice el británico en un amplio perfil publicado en Variety. "Especulaciones sobre paternidad, amoríos, esto, aquello... Es increíble todo lo que podríamos haber escrito".
Desde que empezó la producción de la que será la última temporada de la serie, y una vez confirmado que la narración abarcaría la muerte de la princesa Diana, los medios británicos han estado a la caza de imágenes del rodaje o cualquier filtración de información que permita alimentar una polémica que ha acusado a la serie de "insensible", "explotadora" y "sádica".
Morgan llegó a plantearse no incluir a Diana de Gales en la serie porque sabe que todo lo que rodea su figura es un tema sensible. Así lo demuestra el sinfín de conjeturas y especulaciones sobre cómo se retratará el momento de la muerte de la princesa en The Crown, algo que aparentemente sorprende de sobremanera al creador: "Oh, Dios, nunca íbamos a mostrar el accidente. Nunca".
No solo la forma en la que se retratará la muerte ha sido fuente de polémica. Hace una semana, el Daily Mail publicó un reportaje con información filtrada de la serie titulado "El fantasma de Diana aparecerá en 'The Crown'", en el que describía el contenido y diálogo de dos escenas en las que Carlos y la reina Isabel II hablaban con Diana después de su muerte.
Expertos en la realeza dijeron que la serie se había pasado de la raya, que era "cruel", y una "broma de mal gusto". Morgan aclara que la aparición póstuma de la princesa no pretende ser sobrenatural.
"Nunca lo imaginé como el 'fantasma' de Diana en el sentido tradicional", dice Morgan. "Era ella continuando viva en las mentes de los que ha dejado atrás. Diana era única, y supongo que eso fue lo que me inspiró para encontrar una forma única de representarla. Se merecía un tratamiento narrativo especial".
Las críticas a la serie se agudizaron en la quinta temporada con algunas declaraciones de figuras públicas, entre ellas el ex Primer Ministro John Major, que la calificó como "disparate", o la actriz Judi Dench, que la acusó de "sensacionalismo burdo" en una carta a The Times. Netflix se vio obligada a incluir una cartela aclarando que la serie de ficción era una "dramatización ficticia".
"Todas las críticas sobre la actitud de 'The Crown' hacia la realeza se producen antes de que se estrene la serie", dice. "En el momento en que se estrena y la gente la ve, ya sea Judi Dench o John Major, se callan al instante. Y creo que probablemente se sienten bastante estúpidos", sentencia tajante