Después del éxito abrumador que tuvo la historia de Jeffrey Dahmer, Monstruo fue rápidamente renovada por una segunda y tercera temporada en Netflix y lo que había comenzado con una miniserie pasará a ser una serie antológica con historias independientes. La segunda entrega ya está en marcha y cuenta con el fichaje estrella de Javier Bardem y Chloë Sevigny como protagonistas de los nuevos episodios.
Los dos intérpretes se incorporan al reparto, que ya se anunció que estará protagonizado por Cooper Koch y Nicholas Alexander Chavez. La segunda temporada de la serie antológica creada por Ryan Murphy e Ian Brennan se centrará en los hermanos Menéndez y se estrenará en 2024.
Concretamente, contará cómo Erik (Koch) y Lyle Menéndez (Chávez) fueron condenados por los asesinatos de sus padres, José (Bardem) y Mary Louise “Kitty” Menéndez (Sevigny), en 1996. Las autoridades argumentaron que los hermanos cometieron los asesinatos para heredar la fortuna de su padre, aunque los hermanos sostenían que mataron a sus padres después de años de abuso físico y mental.
Tanto Murphy como Brennan ejercen como productores ejecutivos de la serie junto a Alexis Martin Woodall, Eric Kovtun, David McMillan, Louise Shore y Carl Franklin. La primera temporada seguía al asesino en serie Jeffrey Dahmer y fue un gran éxito para Netflix, alzándose como una de las series en inglés más vistas de todos los tiempos en la plataforma. Tras el fenómeno, Netflix la renovó por dos temporadas más como una serie antológica.
El fenómeno 'Dahmer'
La adaptación de la truculenta historia basada en hechos reales arrasó en Netflix en otoño de 2022 a pesar su prácticamente inexistente campaña promocional. La plataforma ni siquiera anunció la fecha de estrena de la nueva producción de Ryan Murphy hasta cinco días antes de que aterrizara en el servicio de streaming el 21 de septiembre y desde entonces fue un fenómeno impredecible para Netflix.
Evan Peters (un habitual de American Horror Story que ganó el Emmy por Mare of Easttown) interpreta a uno de los asesinos en serie más famosos de la historia en una miniserie de diez capítulos que abarca treinta años en la vida del psicópata, desde su infancia en los años sesenta hasta los noventa, cuando fue arrestado. Dahmer acabaría siendo acusado de matar y descuartizar a 17 hombres y niños entre 1978 y 1991, muchos de ellos personas de color y algunos incluso menores de edad. El asesino murió en 1994 en la cárcel a manos de otro preso. Solo había cumplido dos años de su condena.
La serie llegó a acumular 196,2 millones de horas vistas durante sus primeros días en Netflix y cerca de 300 millones de horas totales. Como pasó en el caso de El juego del calamar y La casa de papel, la producción de Ryan Murphy se ha beneficiado de tener una imagen promocional poderosa (en el caso del thriller psicológico la terrorífica imagen en primer plano de Evan Peters en tonos ocres) y, sobre todo, la incesante presencia de la serie en la portada de Netflix cada vez que abrías la aplicación. No han hecho falta tuits virales ni lonas en los centros de las ciudades para que la gente comentara la ficción sin parar.
Y ha sido este público y el boca a boca los que, entre otros factores, encumbraron a la ficción protagonizada por Evan Peters, que ya forma parte de la historia de Netflix.