El primer true crime que ha estrenado Netflix en 2024 está siendo todo un fenómeno. Pesadilla de un secuestro en California ya es la serie en inglés más vista de la última semana en la plataforma y continúa cautivando a la audiencia desde su estreno.

La serie de tres episodios dirigida por Felicity Morris y Bernadette Higgins (El timador de Tinder) sigue el caso de Denise Huskins, una mujer que fue secuestrada y violada por su agresor, y que al narrar su pesadilla tras ser liberada tuvo que ver cómo la policía ignoraba su trauma y la convertía a ella en la villana, afirmando que lo había fingido todo inspirada por la película Perdida.

Los hechos se produjeron justo un año después del estreno de la película protagonizada por Rosamund Pike y Ben Affleck, y los medios de comunicación no tardaron en construir una narrativa llamando al caso "la 'Perdida' de la vida real". La estrategia vendió muchos titulares y también convirtió a Denise en la persona más odiada por la opinión pública, mientras se recluía con miedo porque sabía que su agresor seguía libre. 

Mat Mustard durante el interrogatorio de Denise Huskins (2015)

La negligencia de la policía de Vallejo

Mientras Denise Huskins estaba desaparecida, Mat Mustard, detective del Departamento de Policía de Vallejo, interrogó a Aaron Quinn durante horas, sugiriendo que estaba involucrado en la desaparición de su novia, según muestran las imágenes de archivo del interrogatorio que se ven en la serie documental

El mismo día que Huskins fue liberada por su agresor, el departamento de policía de Vallejo, que no había hecho ninguna pesquisa ni esfuerzo por buscar a un culpable, dijo en un comunicado que los investigadores "no habían encontrado pruebas de secuestro" y la acusaron a ella y a su pareja de fingir los hechos y de malgastar dinero público.

"No hay pruebas que apoyen las afirmaciones de que se trató de un secuestro por parte de un extraño o de un secuestro en absoluto", dice el comunicado. "Dados los hechos que se han presentado hasta ahora, este suceso parece ser un evento orquestado y no un secuestro".

Matthew Muller en el momento de su arresto

El arresto del culpable

El caso de Quinn y Huskins permaneció sin resolver, hasta que los Servicios de Policía de Dublín del Departamento del Sheriff del Condado de Alameda arrestaron al graduado de Harvard y exmarine Matthew Muller por cargos de un caso separado de allanamiento de morada ocurrido el 8 de junio de 2015.

En el allanamiento de morada de Dublín, una pareja había sido atada mientras Muller intentaba secuestrar a su hija.  Allí los investigadores encontraron un teléfono móvil que consiguieron rastrear hasta Muller.

La policía de Dublín registró la cabaña de Muller en South Lake Tahoe y encontró pruebas que, gracias a la dedicación y perseverancia de la detective Misty Carausu, consiguieron conectar con el secuestro de Huskins. El FBI registró entonces la cabaña, otras dos residencias, un vehículo y un almacén.

[Dónde está ahora Mat Mustard, el polémico policía de 'Pesadilla de un secuestro en California']

El análisis de los ordenadores de Muller realizado por el FBI encontró una "grabación de sonido coherente con las instrucciones dadas al Sr. Quinn y a la Sra. Huskins", así como grabaciones de vídeo de Muller agrediendo sexualmente a Huskins, informó la Fiscalía.

Muller se declaró culpable de un cargo de secuestro en septiembre de 2015 en el caso de Huskins y Quinn, e inocente de dos cargos de violación forzada. También se declaró culpable de los cargos estatales de robo de una vivienda habitada, robo residencial y detención ilegal.

La sentencia de Matthew Muller

El juez federal Troy L. Nunley condenó a Muller a 40 años de prisión por el secuestro de Huskins en 2017. "Es difícil imaginar el nivel de sufrimiento que Muller infligió a sus víctimas", continuó Nunley. "La sentencia dictada hoy tiene en cuenta ese sufrimiento y se esfuerza por garantizar que Muller no vuelva a cometer tales crímenes", dijo el juez. 

El abogado defensor de Muller, Thomas Johnson, abogó por una condena de 30 años, ya que su cliente había sido diagnosticado como maníaco y depresivo y podría rehabilitarse con el tratamiento adecuado. En la declaración jurada de arresto del FBI de 2015 Muller dijo a las autoridades que sufría la "enfermedad de la Guerra del Golfo" y que era bipolar.

En 2022, Muller fue condenado finalmente a 31 años de prisión tras declararse inocente de dos cargos de violación forzada y culpable de otros tres cargos en el Tribunal Superior del condado de Solano. Su condena estatal se cumplirá simultáneamente con la federal.

Dónde está ahora Matthew Muller

Muller está cumpliendo su condena en la Institución Correccional Federal de Tucson, Arizona.

En una entrevista en NBC en 2018, Muller dijo que no era culpable y que se había declarado culpable del cargo federal de secuestro en 2015 "porque sentía pena por la pareja".

"No creo que haya excusa para la forma en que el Departamento de Policía de Vallejo lo manejó", dijo. "Por eso pensé que valía la pena lanzarme y asegurarme de que lograran justicia por esa acusación injusta".

También dijo que su declaración de culpabilidad tuvo que ver con una "depresión severa" en la que cayó mientras estaba en la cárcel de Sacramento. "No me importaba lo que me pasara", dijo.

Su puesta en libertad está prevista para el 8 de julio de 2049, según la Oficina de Prisiones.