Dentro de Lincoln City, el 4% de la población tiene superpoderes. Por el contrario, el 96% restante desconfía de estas personas, al igual que la policía que gobierna la ciudad. Por eso despliegan docenas de drones encargados de atrapar delincuentes, específicamente los que tienen habilidades especiales. Esa es la premisa de Código 8, una película de Netflix cuya secuela es incluso mejor y ha logrado colarse entre lo más visto de la plataforma.
El primer largometraje se estrenó en 2019 gracias a una exitosa campaña de crowdfunding llevada a cabo a través de la plataforma Kickstarter y tuvo una buena acogida por parte de la audiencia, que ha recibido con los brazos abiertos la secuela.
En esta segunda parte, estrenada el pasado 28 de febrero, una chica lucha por buscar justicia para su hermano, que fue asesinado por unos policías corruptos. Ella solicita la ayuda de un ex convicto y su expareja, pero deben enfrentarse a un sargento de policía muy respetado y protegido.
Más allá de la sinopsis
En la parte dos, se retoma la historia en el mismo lugar que quedó Código 8. Ahora, Connor (Robbie Amell) trabaja como conserje después de haber salido de prisión y tras la muerte de su madre. A pesar de distanciarse de Garrett (Stephen Amell) -que en la primera película tiene poderes especiales- y su banda de criminales, Connor se involucra una vez más con él para ayudar a una adolescente llamada Pav (Sirena Gulamgaus) a escapar de un sargento de policía corrupto.
Al igual que la película original, que comenzó siendo un cortometraje, está dirigida por Jeff Chan a partir del guion de Jesse LaVercombe, Sherren Lee y Chris Pare. Junto a Robbie Amell, Stephen Amell y Sirena Gulamgaus, completan el reparto Aaron Abrams, Alex Mallari Jr. y Jean Yoon.
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Por qué es lo más visto
Código 8 tiene algunas razones para haberse consagrado como uno de los éxitos más recientes de Netflix. Y su secuela también. Ambas cumplen sobradamente con las dosis de acción que prometen, dándole además al público una historia lo suficientemente intrigante con varios protagonistas de los que querer saber más.
Y desde que los poderes de Connor han dejado de ser un secreto, las escenas que protagoniza son incluso más espectaculares y no es de extrañar que el público se quede embobado viéndole hacerse más y más fuerte. Además, el giro final de Código 8 (Parte 2) es una de las razones por las que sentarse a verla.
Sin duda alguna los números le acompañan y la secuela ya acumula 20 millones de visualizaciones en su primera semana y es una de las diez películas más vistas en hasta 93 países de todo el mundo, incluido España.