Una fiesta ilegal de Halloween en Sevilla acaba con un padre y su hijo heridos graves tras ser apaleados y apuñalados
Sólo dos agentes trabajaron esa noche en La Puebla del Río, asegura la propia Policía Local en redes sociales.
2 noviembre, 2023 11:17Aunque la noche transcurrió con normalidad en Sevilla la pasada noche de Halloween, en comparación con el año pasado en la que murió un joven en Palomares del Río, no se celebró exenta de sucesos.
Un joven y su padre acabaron la noche ingresados en el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla tras resultar heridos de gravedad cuando participaban en una fiesta ilegal que se estaba celebrando en un polígono industrial en La Puebla del Río.
El joven, de unos 20 años, fue brutalmente atacado con una barra de hierro hasta quedar inconsciente y su padre fue apuñalado con un arma blanca en un costado cuando salió en su defensa y en busca de los agresores.
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Los presuntos agresores, que aún no han sido identificados ni detenidos, son vecinos de Coria del Río. La Policía Local espera en las próximas horas que los dos agredidos presenten la correspondiente denuncia.
Según ha adelantado ABC de Sevilla, los acontecimientos tuvieron lugar en una nave del polígono Las Pompas del municipio aljarafeño. Un poco antes de las cuatro de la madrugada, los agentes recibieron una llamada de alerta sobre "un grave altercado" que involucraba a un joven que estaba en una fiesta ilegal de Halloween.
El mismo fue encontrado inconsciente en la acera de una calle en la zona industrial, con múltiples heridas en el rostro y en todo el cuerpo realizados con una barra de hierro, que fue encontrada en un lugar próximo. Actualmente se encuentra en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).
Según asegura la propia Policía Local en redes sociales, en ese momento contaba sólo con dos agentes para todo el municipio de La Puebla del Río. Cuando se produjo el altercado solicitó apoyo a la Guardia Civil, pero cuando llegaron ya no había nadie en la nave donde se celebraba la fiesta.
La noche en Sevilla capital transcurrió con normalidad, aunque fueron gestionados un total de 184 sucesos desde el centro de control, la mayoría de ellos por ruidos y botellón. También se inspeccionaron 18 establecimientos de los que cinco fueron desalojados y precintados.