Al alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, no le gusta la instalación de una carpa que se ha hecho en la Plaza de España. Pero, ha explicado, pagan las tasas correspondientes, 122.000 euros y tienen los permisos pertinentes.
En todo caso, ha señalado Sanz, este es el último permiso que se da para usar la Plaza de España como espacio donde instalar una carpa como esta. Este caso es, además, "herencia" del anterior equipo de Gobierno, ha indicado el alcalde.
Para el próximo año las cosas cambian. "A partir del año 2024 la utilización de dicho espacio para eventos y celebraciones se regirán por autorizaciones específicas de alcaldía". Con esta medida pretenden "mantener la integridad artística y cultural de este espacio tan emblemático".
[La plaza de España suspendió la Inspección Técnica de Edificios del año pasado]
La instalación se debe a una convención de la empresa Poltrone, una compañía italiana, ha explicado Sanz. Supone, ha detallado, que lleguen a la ciudad hasta 1.500 personas que "se alojan en hoteles de cinco estrellas".
"Turismo de calidad"
El gasto de la carpa, sumado al de la pernocta de estas personas, valoran desde el Consistorio, es alto. Es "turismo de calidad", ha añadido Sanz.
Además, ha desvelado el alcalde, la misma convención tiene reservado el Palacio de Exposiciones de Sevilla Este, FIBES, donde van a desarrollar "sus ponencias y formación" estos días en la capital andaluza.