La propuesta de cobrar una entrada para el acceso a la Plaza de España a turistas ha generado mucho debate entre los sevillanos. Si bien algunos se muestran partidarios, otros incluso se han unido para iniciar una recogida de firmas.
Es el caso de Nacho Molina y Jesús Juan Pérez. El mismo día del anuncio del alcalde ambos coincidieron al lanzar una petición en Change.org. Y en solo dos días han recogido más de 22.000 apoyos.
José Luis Sanz, ha defendido la propuesta, ya que asegura que no es posible sufragar el mantenimiento de la Plaza de España “solo con el IBI que pagan los sevillanos”.
Sin embargo, el Gobierno, que tiene oficinas en la plaza no está por la labor. De hecho, María Jesús Montero, ministra de Hacienda, ha comentado que “no se va a prestar ello”.
"Conexión intercultural"
Mientras tanto, los sevillanos siguen secundando estas peticiones lanzadas por separado, pero que recogen firmas de manera conjunta.
Uno de los impulsores, Juan Jesús Pérez, hace un relato muy personal sobre el monumento con la idea de “impedir la privatización”, tal como él suscribe.
“Desde hace años, la Plaza de España ha sido un lugar de encuentro para mi familia y muchas otras. Yo llevo a mis hijas allí desde que nacieron. Es un espacio público y gratuito que fomenta la conexión intercultural, una joya en el corazón de nuestra querida Sevilla”, explica.
A juicio de Juan Jesús, la propuesta de cobrar entrada a los turistas iría contra “el espíritu comunitario e inclusivo que siempre ha caracterizado” a la obra de Aníbal González.
Cree que traerá "colas" y "dificultades"
Por ello, pide al Ayuntamiento que reconsidere su decisión en la misma línea que Nacho Molina. En su petición destaca que la Plaza de España siempre “ha sido un espacio público, para disfrute de la ciudad y de sus visitantes”.
Así, aunque reconoce que a los sevillanos no se les cobrará entrada, cree que la nueva propuesta traerá “colas, dificultades, y complicaciones para quienes hemos sido, antes y ahora, asiduos de ese espacio”.
Nacho va incluso más allá y propone otras maneras de “obtener algún rendimiento económico”, tales como “la regulación de los pisos turísticos” o “la aprobación de una tasa turística”.
Vigilancia 24 horas
José Luis Sanz, por su parte, cree que dicha tasa turística no es incompatible con la medida de la Plaza de España, que no estaría sometida a ninguna privatización, tal como ha explicado.
Simplemente se cobraría una entrada que permitirá poner vigilancia 24 horas y tener un taller de restauración permanente para reparar los efectos del vandalismo, que es “constante”.
En el caso de cobrar una entrada de tres o cuatro euros, según el planteamiento del alcalde, Sevilla podría llegar a recaudar un máximo de 12,8 millones de euros. El cálculo tiene en cuenta los 4 millones de visitantes que suele recibir la provincia y que el 80 por ciento suele visitar el monumento de Aníbal González.