Sevilla continúa de luto por las seis personas que perdieron la vida el pasado martes en el accidente de tráfico que tuvo lugar en la carretera AP-4. El siniestro se produjo de madrugada, en torno a las 04:00 horas, después de que un camión impactase contra un control que la Guardia Civil había montado en el kilómetro 20 de la vía que une Sevilla y Cádiz.
Entre los fallecidos se encontraban dos guardias civiles: uno de 37 años y natural de Vitoria, el cabo Eneko, y otro de 34 años y natural de El Ejido, el agente Juan Jesús. Además, el accidente dejó cinco heridos más, también miembros de la Guardia Civil.
En los últimos días han sido muchas las teorías que han surgido en torno a las causas del trágico suceso. Sin embargo, parece que las piezas empiezan a unirse para conocer al detalle qué ocurrió durante la madrugada del lunes al martes. Tras realizar las pruebas pertinentes, se ha demostrado que el camionero no conducía bajo los efectos del alcohol o las drogas.
Al parecer, el conductor del vehículo, un ciudadano de origen español sin antecedentes y que circulaba a 90 kilómetros por hora, trató de frenar, pegó un volantazo y sufrió el conocido como 'efecto tijera', desviándose hacia el arcén y arrollando a los vehículos que formaban parte del control.
Eso sí, las primeras hipótesis apuntan a la somnolencia como una de las principales causas de la distracción que pudo provocar que el conductor no se percatase del control antes.
Pero, ¿qué es el 'efecto tijera' que pudo haber sufrido el camión y que pudo provocar el atropello múltiple y mortal? Pues bien, el 'efecto tijera' es un giro accidental que se produce en la camina de un camión.
Al ir circulando a cierta velocidad y producirse un bloqueo de las ruedas, estas pierden su capacidad para mantener firme la dirección del vehículo —en este caso un camión— y hace que este siga en línea recta hasta que las ruedas vuelvan a girarse.
Cuando se produce este peligroso y famoso 'efecto tijera', lo que ocurre es que las ruedas del camión se bloquean. Y cuando esto ocurre, el remolque tiene mucha menos capacidad para frenar.
Este hecho podría haber sido lo que provocó que el camión, al frenar y esquivar el control, bloqueara sus ruedas y se desviase hacia el arcén arrollando a los vehículos que se encontraban estacionados.
Desde la DGT han recalcado en muchas ocasiones la necesidad de conducir con especial cuidado camiones, con el objetivo de evitar que se produzcan estos 'efectos tijera'. Los conductores de camiones con remolque pueden experimentarlos en cualquier situación y suelen producirse como consecuencia de un frenazo brusco.
Sin embargo, en ocasiones, el viento suele tener un papel importante. Y es que, según han explicado desde la DGT en numerosas ocasiones, el viento puede provocar que el remolque se gire provocando un accidente. Para minimizar este efecto, la DGT recomienda reducir la velocidad hasta notar que podemos tirar del remolque sin que se desestabilice.
Además, existen en la actualidad algunas tecnologías como la ESP, un sistema obligatorio para coches y furgonetas nuevas desde el año 2014 que, además de evitar posibles pérdidas de adherencia, detecta cualquier signo de inestabilidad.
Más datos sobre el accidente
Según han ido avanzando las horas se han podido conocer más detalles sobre el trágico suceso que ha sacudido Sevilla. En primer lugar, el camión era de la empresa Transmoro y lo conducía Hipólito, un camionero de 59 años, natural de Huelva y con muchos años de experiencia. El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Utrera (Sevilla), en funciones de guardia, ha ordenado en las últimas horas el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza para él.
Además, poco a poco se han podido conocer más informaciones sobre las víctimas mortales. Dos de ellos eran guardias civiles: Eneko y Juan Jesús. El resto eran un vecino de Barbate de 50 años, un vecino de Dos Hermanas de 47 años, un joven de 20 años que residía en Vizcaya y un ciudadano de Ceuta de 53 años. Dos de ellos tenían antecedentes por drogas, según adelantó Canal Sur