Habían estafado 20.000 euros a "numerosas" personas desde Dos Hermanas. Lo hacían mandando mensajes de Whatsapp a los móviles de las víctimas en los que se decía que sus hijos tenían problemas y necesitaban dinero.
La investigación se inició al saberse que había jóvenes en Dos Hermanas que recibían dinero en sus cuentas para una organización criminal. A cambio, recibían un pago. Su tarea consistía en dar números de cuentas donde poder recibir esas transferencias.
Pero el dinero tenía un origen ilícito, señala la Policía Nacional, encargada de la investigación. Venía, señalan los agentes, de estafas previas.
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Los jóvenes solo tenían que dejar que se hicieran las transferencias en sus cuentas y, después, lo sacaban en efectivo para entregárselo a los miembros de la red criminal. El pago era variable, señalan desde la investigación.
"Mulas financieras"
En Dos Hermanas los encargados de recibir el dinero eran dos vecinos. Uno de ellos, que trataba con los jóvenes o "mulas financieras", era el líder de la organización, pagaba cantidades "variables" de dinero a los jóvenes por sus servicios.
Dentro de la red había otras dos personas que se dedicaban a captar a las "mulas financieras". Esos jóvenes, según los investigadores, son parte también de la trama criminal puesto que, al dar sus cuentas, participaron de las estafas.
La Policía reconoce que los jóvenes que se prestaban al acuerdo no siempre sabían de la procedencia ilícita del dinero que les llegaba a sus cuentas.
Mensajes de ayuda
La organización mandaba mensajes como "Hola mamá mi teléfono se cayó al agua y mi tarjeta SIM también está rota. Este es el nuevo número envíame un mensaje por esta aplicación".
De este modo, los estafadores conseguían establecer una conversación en la que se hacían pasar por los hijos de las víctimas, argumentando un problema económico que debían solventar inmediatamente, logrando así que éstas realizaran transferencias inmediatas de dinero.
Por todo ello, la Policía Nacional, una vez hubo identificado plenamente a los presuntos autores, procedió a su detención y posterior puesta a disposición de la Autoridad Judicial por los delitos de estafa continuada y pertenencia a grupo criminal, habiéndose lucrado con una cantidad total de dinero cercana a los 20.000 euros.