La Guardia Civil ha detenido a seis personas en Jaén como culpables de un asesinato que se cometió en Sevilla en mayo del año pasado. El siniestro tuvo lugar en una finca agrícola situada en una carretera entre Utrera y Los Palacios. 

Al principio se pensó que la víctima había muerto quemada. El cuerpo apareció en una casa de campo que había ardido y los restos estaban carbonizados. Sin embargo, al llegar a la sala de autopsias se descubrió que la muerte se había producido por disparos. 

Así, "el servicio de criminalística de la Guardia Civil, tras la aplicación de un proceso técnico científico, consiguió identificar el cadáver pese a su avanzado estado de carbonización debido al uso de acelerantes", señalan fuentes de la investigación.

El caso, añaden, "ha supuesto un desafío para los investigadores, dada la ausencia de información inicial disponible que pudiera determinar el móvil del crimen.

Sin embargo, las complicadas pesquisas que se han desarrollado han dado sus frutos un año después con la detención de seis personas en Jaén, a los que se considera autores del crimen. 

Tres registros

En el dispositivo policial "se realizó un amplio despliegue de efectivos de la Guardia Civil en la ciudad de Jaén, realizándose tres registros en domicilios vinculados a los detenidos en los que se han hallado numerosos indicios de la autoría y que han culminado con el esclarecimiento del crimen.

Los seis detenidos han ingresado en prisión preventiva como autores directos del asesinato, por orden de la Autoridad Judicial competente de la causa. Sin embargo, la investigación sigue abierta y no se descartan nuevas detenciones.