Vox Sevilla se ha mantenido constante con su mensaje desde las elecciones municipales del año pasado: si el alcalde, José Luis Sanz, quería sus votos, debían gobernar juntos. Eso se enfrentaba a la postura del primer edil, que siempre ha insistido en que no quería ni quiere gobernar en coalición. Y, por lo tanto, ha resultado en un 'no' constante de los de Abascal. 

En todo caso, nadie puede acusar a Vox Sevilla de dar bandazos o de cambios de opinión por estrategias políticas puntuales. Han mantenido la idea de 'Gobierno u oposición' desde el principio. 

En el fondo de ese razonamiento, explicaban en privado en el partido, estaba la falta de confianza para dar su apoyo al PP. Fuentes de la formación recordaban cómo la alianza con el presidente de la Junta, Juanma Moreno, en el Gobierno del cambio que salió de las urnas en 2018 en la Junta no resultó como querían.

Entonces, señalan, sintieron que los populares se valieron de su apoyo para desalojar al PSOE de San Telmo, pero no les dieron el espacio o las políticas que habían pactado. Por eso, razonaban en Vox Sevilla, si negociaban un pacto en el Ayuntamiento debían poder fiscalizar las medidas desde dentro. 

Pero hay dos elementos que pueden cambiar esto: en primer lugar, que el alcalde, José Luis Sanz, ha conseguido sacar adelante sus Presupuestos de 2024 sin el apoyo de Vox. Tampoco los del PSOE o IU-Podemos. Se ha valido de una herramienta que vincula la luz verde de las cuentas a una posible moción de censura y la estrategia ha funcionado. 

Su estrategia de gobernar en solitario ha resultado un acierto del que ahora recoge los frutos. No ha tenido que ceder ni un ápice con exigencias de posibles socios y tiene las cuentas que diseñó para empezar a aplicar su modelo de ciudad desde ya. 

Esta es una jugada, además, que ha gustado en el partido. La dirección, de hecho, alabó la idea y aseguró que lo van a exportar a otras instituciones, lo que le garantiza reconocimiento y más proyección nacional al líder del PP en Sevilla.  

Santiago Abascal

El segundo elemento que puede cambiar las reglas de juego está en la orden de la dirección nacional de Vox de romper cualquier gobierno que pudieran tener con el PP. Eso ha supuesto que salgan de cinco ejecutivos en otras tantas comunidades autónomas. Y cierra la puerta a la aspiración del partido en Sevilla de condicionar su apoyo a ciertas medidas a cambio de tener capacidad de gestión dentro del Gobierno municipal. 

Los ediles de Vox en Sevilla, en una reunión. EP Sevilla

Pero, si bien el Presupuesto está aprobado, eso no quiere decir que el Ejecutivo local no necesite de votos de la oposición para sacar cuestiones adelante. Vox puede ser clave en muchos asuntos puesto que hay modificaciones presupuestarias, por ejemplo, que necesitan del apoyo de otros grupos, aparte del popular. 

Esto se vio el pasado Pleno ordinario de julio. El Gobierno municipal llevó a votación más de 20 millones de euros de modificaciones presupuestarias para cuestiones como la limpieza de Sevilla o para mantener el transporte público bonificado. Temas relevantes para la ciudadanía. 

Peso de Vox

La segunda cuestión es la que, según fuentes municipales, puede tener más peso en el un posible cambio de postura de Vox Sevilla. Si el partido no puede entrar en el Gobierno municipal por decisión de la propia formación, ¿seguirán en el 'no' o puede que se avengan a negociar puntos concretos?

El propio alcalde reconocía a EL ESPAÑOL en una entrevista que la decisión de Santiago Abascal puede provocar ese cambio en los ediles de Vox. Señalaba que sus compañeros de corporación tenían el verano para pensar sobre si, en septiembre, querían mantener o no la posición que defendían hasta ahora. 

La cuestión es que el voto de Vox en Sevilla puede ser clave. Porque hay asuntos -la organización del centenario de la Expo de 1929; los cambios en la Feria; obras de calado; el Presupuesto de los próximos años...- que requerirán de alianzas por la mayoría simple del PP en el Consistorio. 

Así las cosas, hay por delante dos Plenos para ver si existe ese cambio. Este mismo jueves está el debate del estado de la ciudad. Y el 8 de agosto, el Pleno extraordinario para aprobar de forma definitiva el Presupuesto.