La Audiencia de Sevilla ha confirmado la sentencia de un hombre que irrumpió en una finca del municipio de Écija (Sevilla) con objeto de robo. El autor de los hechos trató de aminorar o excluir mediante un recurso de apelación la pena impuesta de dos años y ocho meses de cárcel. Este recurso finalmente ha sido denegado por el juez, respaldando así la primera sentencia.
Los hechos tuvieron lugar el 21 de octubre de 2021 a las 23:30 horas en una propiedad privada de la provincia sevillana. Según la propia sentencia, el individuo irrumpió en la finca propinando "fuertes patadas a la puerta de la cancela hasta abrirla". El objetivo era sustraer leña para luego cargarla en una espuerta que él mismo portaba y después emprender la huida en su ciclomotor.
Sin embargo, las complicaciones no tardaron en aparecer para el ladrón, que fue sorprendido por el propietario de la parcela. Fue con este con quien protagonizó "un forcejeo" que derivó en lesiones leves para la víctima, por las que el autor de los hechos deberá responder con una multa de 150 euros.
Según la sentencia, fruto del forcejeo entre ambos, se produjo una caída al suelo del damnificado que derivó en "lumbalgia postraumática, contusión en rodilla izquierda, erosión en mano derecha y crisis de ansiedad".
Además, el acusado cuenta con antecedentes penales por robo con fuerza y por ello acumula el agravante de reincidencia. Como redacta la sentencia, accedió a la finca habitada "guiado por el ánimo de obtener un ilícito enriquecimiento".
"El acusado abrió la cancela exterior propinando fuertes patadas a la puerta de la cancela hasta abrirla aun sin fracturarla. Una vez dentro, el acusado, quien iba en un ciclomotor llevando una espuerta, se dirigió a la leñera comenzando a cargar troncos de la misma en tal espuerta, siendo entonces recriminado por el propietario de la finca, quien le preguntó qué hacía", señala el relato de hechos probados de la sentencia inicial condenatoria.
La apelación
El pasado 20 de mayo la Audiencia de Sevilla recogió el recurso de apelación del presunto culpable de los hechos. En él, aseguraba que fue el denunciante el que le llamó "para recriminarle robos anteriores sufridos en su parcela y el que comenzó a agredirlo, lo que habría motivado que el acusado se defendiera con troncos de leña que había junto a la casa".
Sin embargo, la Audiencia, tras analizar lo sucedido, considera que queda "probado de forma suficiente que el acusado intentó apoderarse de efectos (leña), los cualles llegó a introducir en la espuerta que llevaba en su ciclomotor y ante los reproches y el intento del denunciante de evitar la consumación del hecho, se produjo un altercado físico entre ambos". El dueño de la finca "intentó evitar la huida del acusado con los efectos y este, por su parte, buscó zafarse de la retención que sufría".
La Sección Primera de la Audiencia de Sevilla ha desestimado por tanto el recurso de apelación emitido por el enjuiciado y confirma así la condena a dos años y ocho meses de cárcel por un delito intentado de robo con violencia en casa habitada con la agravante de reincidencia, así como a una multa de 150 euros por un delito de lesiones leves.