El Ayuntamiento de Sevilla, a través de la Gerencia de Urbanismo y Medio Ambiente y Emasesa, iniciará este lunes las obras de reurbanización de Marqués de Paradas en el tramo comprendido entre las calles Pedro del Toro y San Laureano. Esta iniciativa contará con una inversión total aproximada 325.000 euros.
El objetivo principal es ordenar el aparcamiento de la zona, ya que la amplitud de la calle permite actualmente la doble fila en algunos puntos. En concreto, se contempla la ampliación de las aceras en aproximadamente 80 centímetros de media, dejando el aparcamiento en batería y reservando la zona cercana a San Laureano para motos.
La pavimentación de las aceras se realizará con solería de taco hexagonal de terrazo pulido en color gris, con un encintado de granito. En cuanto al aparcamiento, se empleará hormigón fratasado con un encintado de hormigón bicapa.
El proyecto incluye la renovación de las redes de abastecimiento y saneamiento a cargo de Emasesa, y la mejora de los pavimentos por parte de la Gerencia de Urbanismo y Medio Ambiente a través del contrato de conservación de pavimentos.
Además, se mejorará la red de alumbrado público y se garantizará un itinerario peatonal accesible, ha detallado el delegado de Urbanismo, Juan de la Rosa.
Los trabajos se harán por fases, siendo la primera desde la calle Pedro del Toro hasta San Laureano. La misma coincide con la necesidad de Emasesa de cambiar las redes que están obsoletas, que estará terminada antes de Semana Santa.
Se continuará con la fase dos que comprende desde Pedro del Toro hasta Canalejas, que comenzará una vez finalizada la Semana Santa.
Según ha explicado el edil, en primer lugar, Emasesa comenzará a renovar las redes de agua, alcantarillado y riego. A continuación, Urbanismo intervendrá para repavimentar el acerado y la banda de aparcamiento. El primero se pavimentará en terrazo hexagonal con bordillo de granito y el aparcamiento en hormigón.
Como consecuencia de la actuación se mejorarán también las condiciones de accesibilidad. Esta actuación tiene una duración estimada de tres meses y conllevará algunos cortes de tráfico puntuales.