Sevilla está repleta de lugares emblemáticos, muchos de ellos de gran peso histórico para la ciudad, y otros gozan incluso de fama internacional. Es el caso de la Giralda, el Real Alcázar o la Catedral.
Existen, en consecuencia, rincones específicos desde los que se pueden obtener imponentes panorámicas de dichos monumentos. Uno de ellos, sin embargo, es muy poco conocido aunque de acceso gratuito, y está situado en pleno casco histórico.
Se trata de la azotea del edificio que ahora es sede de la Fundación Biodiversidad del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente. A tres minutos de la Giralda y a la entrada del Barrio de Santa Cruz, este edificio forma parte del Bien de Interés Cultural Real Alcázar, declarado en 1931.
De hecho, en su interior conserva elementos arqueológicos de gran valor como una porción de la Muralla y la primitiva Puerta del Alcázar taifa, que fue construida en el siglo XI.
Al tratarse de una institución pública, a él se puede acceder desde el Patio de Banderas, y sólo es necesario subir unas escaleras para llegar a la azotea, desde donde varios usuarios de Tik Tok ya han compartido vídeos e imágenes.
El mirador
Y no es para menos, porque hasta ahora, este lugar era muy poco conocido. La afluencia de visitantes sigue siendo muy reducida, por lo que no es difícil subir hasta arriba del todo y encontrar el mirador vacío, con libertad y una amplitud de 171 metros cuadrados para disfrutarlo.
Suele encontrarse abierto al público en horario de mañana, de lunes a viernes. Nada más llegar hasta arriba, la Giralda se alza frente al visitante con una impactante majestuosidad.
Del lado izquierdo cae el Patio de Banderas, por el que se accede al edificio, y que supone otro de los mayores atractivos de este mirador.
La sede
El edificio, que tiene varias plantas, alberga en su interior, además de la primitiva Puerta y el muro de la Judería, una detallada maqueta que recrea el origen del Alcázar de Sevilla.
Además, la sede cuenta con un patio de luces interior protegido con un lucernario artístico y las salas Dehesa y Arrecife, con capacidad para 12 y 24 personas respectivamente. Allí suelen organizarse distintos eventos o exposiciones propias de la Fundación.
Como es sabido, Sevilla siempre alberga rincones secretos y sorprendentes en cada uno de sus barrios, aunque estén situados, como es este caso, en la zona más turística de la ciudad.