El Ayuntamiento de Sevilla, a través de la Gerencia de Urbanismo, ha adjudicado las obras de repavimentación y ampliación de las aceras de la Avenida de Jerez, en el tramo comprendido entre la Avenida de Bellavista y la calle Sarmiento.
Con un valor de intervención de 190.421€, estas mejoras pretenden solucionar el mal estado general que presentan las aceras de la Avenida de Jerez, en el tramo que discurre entre la Glorieta Presos de los Merinales y la calle Sarmiento, y la estrechez en determinados puntos.
El delegado de Urbanismo, Juan de la Rosa, ha explicado que con esta actuación se "pretende mejorar dicha vía, desde el punto de vista urbanístico, dando lugar a espacios más accesibles".
De la Rosa apunta a su vez que "se conseguirá resolver todos los desperfectos y problemas actuales de barreras urbanísticas, además de conseguir más amplitud en las zonas donde se precisa".
Renovación del pavimento
La intervención contempla también la renovación del pavimento de las bandas de aparcamiento laterales que, como en el caso de las aceras, presentan también un deficiente estado de conservación, por lo que se va a sustituir la actual capa de hormigón por una nueva.
De esta manera, se va a proceder a repavimentarlas en toda su extensión, así como a la ampliación en puntos del recorrido.
Estos puntos son los siguientes: el frente de la Real Venta de Antequera, la confluencia con la calle Mallorca, la delantera del colegio St. Mary´s School y las cercanías del Hospital Santa Ángela de la Cruz, donde se agrandará la plataforma de contenedores de residuos.
La actuación se completará con la creación de nuevos alcorques, con su plantación correspondiente. Tras el proceso de licitación, el proyecto finalmente ha sido adjudicado a la empresa Construcciones Garrucho S.A. y en breve se espera poder iniciar las obras, que estarán listas en un plazo de dos meses y medio.
Nueva salida para el Colegio
Por otro lado y dentro del mismo distrito Bellavista-La Palmera, el gobierno municipal prolongará la calzada de la calle Camino del Silo para proporcionar una salida alternativa en casos de emergencia al colegio de educación especial Directora Mercedes Sanromá.
La obra, que está ya en fase de licitación, resolverá esta deficiencia de seguridad que, según una nota del consistorio, había sido manifestada en numerosas ocasiones por el AMPA y la dirección del centro desde hace décadas.
En la actualidad, el único acceso al citado centro es a través de un viario público perpendicular a la calle Camino del Silo, que tiene una longitud de 90 metros y una anchura inferior a cinco, dimensiones que no hacen posible la circulación de dos vehículos simultáneamente en sentido contrario.
Esta deficiencia se ve agravada además por el hecho de que, al tratarse de un Centro de Educación Especial, muchos de los alumnos acceden en autobús hasta el interior del mismo. A la vista de ello, afirman desde el Ayuntamiento, en caso de que este viario se viese bloqueado por cualquier motivo (avería de un vehículo, deterioro, obras, etc.), resultaría imposible la evacuación de los alumnos.
Así, para hacer frente a esta problemática se ha planteado como solución la prolongación de un viario existente junto al Instituto de Educación Secundaria Federico Mayor Zaragoza, que también es perpendicular a la calle Camino del Silo.
De esta manera, se proporciona un nuevo acceso al citado colegio de Educación Especial en situaciones de emergencia. Para salir desde el centro a este este nuevo tramo de viario, el servicio de Edificios Municipales abrirá una puerta a dicha vía desde el patio trasero del colegio.
Aparcamiento de autobuses
La actuación urbanística se va a completar además con la creación de un aparcamiento de autobuses en línea en el lateral del centro, que actualmente no existe.
Ello se complementará, según reza una nota de prensa del Ayuntamiento, con la conformación de un acerado junto al colegio con alumbrado público, para permitir igualmente el tránsito seguro de personas en caso de evacuación.
Este importante y esperado proyecto de obras ha sido presupuestado en 200.500 euros y tiene un plazo de ejecución de cuatro meses.