El Ayuntamiento de Sevilla ha sacado adelante su propuesta de ordenanzas fiscales para "aminorar la carga fiscal de todos los sevillanos", tal como ha defendido el portavoz municipal, Juan Bueno. Después del rechazo de todos los grupos de la oposición a inyectar 2,5 millones en Contursa, en este caso la abstención o el apoyo expreso de Vox ha permitido sacar adelante todos los puntos que se votaban.

El partido de Santiago Abascal sigue así la estrategia marcada tras permitir aprobar al PP la limitación de los pisos turísticos al 10 por ciento en cada barrio. El equipo municipal venía negociando la norma durante ocho meses, pero hasta este mes de octubre había recibido el rechazo de toda la oposición.

Durante los primeros meses de legislatura, Vox había votado en contra de la mayoría de los temas centrales. En cambio, desde el inicio del curso político se ha abierto a aprobar algunas de las medidas planteadas por el Ayuntamiento, pese a optar en el caso de Contursa por el voto negativo.

Ahora, su postura ha sido decisiva especialmente para establecer la modificación del IBI. Así, se bonificará al 50 por ciento durante nueve años a las familias numerosas independientemente de su renta. También se aplicará para las viviendas protegidas y para los comercios emblemáticos. 

Tanto PSOE como Podemos-IU votaron en contra y se mostraron muy críticos por la propuesta que, según consideran, "elimina la progresividad fiscal". También expresaron su voto negativo en la moción presentada para subir un euro los precios de la entrada al Alcázar y equiparar los costes en taquilla y online. En ambos casos, con la abstención de Vox, decidió el voto de calidad del alcalde.

El resto de puntos sí fueron apoyados con abstención o incluso el voto positivo de los otros grupos. Recibió todos los síes la bajada de la tasa reservada al espacio de las paradas de autotaxis. Por su parte, se aprobó con tres abstenciones y el voto favorable del PP la posibilidad de fraccionar sanciones tributarias en periodo voluntario de pago.

Por su parte, Podemos-IU votó junto al PP, con la abstención de PSOE y Vox, para dejar sin la bonificación del Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras (ICIO) a los apartamentos turísticos.

Además, el voto afirmativo de PP y Vox y la abstención de Podemos IU y PSOE, también ha servido para aprobar una tasa de entrada y salida de vehículos y que beneficiará a los vecinos que se ven afectados por la tardanza de las obras frente a sus domicilios.

"Enmendar el error"

Desde Vox señalan que con estas ordenanzas fiscales "el PP ha querido enmendar el error del año pasado de aprobarlas junto al PSOE". Para Cristina Peláez, supuso "una subida encubierta de los impuestos".

No obstante, consideran que se podría haber incluido "una rebaja del IBI para compensar el tarifazo de la basura que todos los Ayuntamientos de España van a tener que repercutir en los ciudadanos". "Podíamos haber sido más ambiciosos para bajar los impuestos a los sevillanos", ha recalcado.

"Bajada paultatina del IBI"

A este respecto, Juan Bueno ha reconocido que el impuesto de residuos "distorsiona mucho" los planes, aunque la idea sigue siendo plantear una "bajada paulatina del IBI durante todos los años".

Por su parte, muy crítico con la medida de eliminar la progresividad fiscal en la bonificación al IBI se ha mostrado Antonio Muñoz. "Beneficia a las familias numerosas con rentas superiores a 100.000 euros", ha lamentado. 

"Nuestros principios es que las tasas de impuestos tienen que ayudar a financiar los servicios publicos. El porcentaje desde que gobierna Sanz va en descenso", ha insistido el portavoz socialista.

El apoyo de Vox, ya sea en forma de abstención o voto afirmativo, a las ordenanzas fiscales confirma el acercamiento al PP, que necesita aprobar los presupuestos de 2025. No obstante, en el mismo Pleno, el partido de Santiago Abascal ha vuelto a votar en contra de una inyección presupuestaria de 2,5 millones a Contursa.