Miguel Arco
Sevilla
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Antonia María Jiménez nunca olvidará la tarde del martes 29 de octubre. Esta mujer de 72 años (Valencia), perdió a sus nietos Rubén e Izan, de 3 y 5 años. La corriente los separó del abrazo de su padre en Torrent (Valencia) Desde entonces no tiene noticias de ellos. Lamenta que las autoridades "no han hecho nada" por encontrarlos.

Por ello, ha empezado a acudir a los medios, entre ellos a los de RTV Marchena, el pueblo de Sevilla donde nació, para contar el caso. Ese día, pese a que, según cuenta la alerta no les llegó hasta las 20:00, estaba con sus nietos, porque sus padres decidieron no llevarlos al colegio.

Sobre las 15:00 su hijo vino a recogerlos y se los llevó a su casa, Todavía llovía "poco", cuenta Antonia. A las 18:00 se le fue la luz. "De repente se cayó la pared de la habitación y se los llevó la corriente", revela.

Se dejaron llevar por el agua, mientras seguían los tres abrazados. La fuerza del caudal "se los quitó de las manos a su hijo", que se pudo enganchar a un árbol con la cabeza fuera. 

"Estuvo cinco horas enganchado sin poder hacer nada, sabiendo que sus hijos se le habían ido, aguantando por su mujer para que no se quedara sola", explica Antonia. Fue a las cinco de la madrugada, cuando el nivel del agua bajó y "un vecino pudo cogerlo".

Su hijo está ahora ingresado en un hospital de Valencia y lo han operado dos veces por las infecciones que tiene en las piernas. La familia ha quedado devastada, pero ahora la preocupación se centra en encontrar a los pequeños. Ella prefiere quedarse en su casa para contar la historia a los medios.

Antonia denuncia que el Ayuntamiento de Torrent no ha hecho nada, pese a que, tal como explicaba su alcaldesa, Amparo Folgado, en La Sexta, fue de los primeros ayuntamientos en establecer un decreto para suspender todas las actividades.

Ella asegura que está bien y no necesita "nada", pero pide ayuda para encontrar a sus nietos. La casa de su hijo estaba junto a un barranco, que hoy está lleno de barro y con coches que han sido arrastrados por la corriente. El inmueble ha quedado completamente destrozado.

Varios efectivos de los GEAS (Grupos Especiales de Actividades Subacuáticas) de la Guardia Civil están peinando ahora la zona en busca de los pequeños desaparecidos.

El pasado 3 de noviembre, SOS Desaparecidos lanzaba la alerta para encontar a los pequeños, Rubén e Izán, de 3 y 5 años, respectivamente. Ha pasado una semana desde que no se sabe nada de ellos.