Sevilla
Publicada

El tranvía de Sevilla cumplió 17 años el 28 de octubre. Ese mismo día de 2007 se inauguró una infraestructura que ha pasado por diferentes épocas y que atraviesa su mayor época de expansión, con el reto de alcanzar los 30.000 viajeros diarios y los 7,5 millones anuales. 

Es la previsión del Ayuntamiento de Sevilla para cuando el recorrido llegue a la estación de Santa Justa. Ahora, recibe menos de la mitad, 2,91 millones de viajeros en 2023.

Ha ido perdiendo pasajeros desde 2011, cuando fue su mejor año, con 4,78 millones de pasajeros anuales. No obstante, desde el Consistorio esperan que la ampliación por Nervión sirva para reflotar los números.

De hecho, tal como revelan, solo desde el 19 de junio al 31 de octubre, el tranvía transportó 1.168.544 viajeros. Supone un 25 por ciento más que en el mismo periodo del año 2023. Es en este tramo cuando ha estado disponible la segunda parte de la ampliación con las nuevas paradas de San Francisco Javier y Eduardo Dato.

Con la de Luis de Morales, se espera otro crecimiento para pasar de los 12.000 a los 17.000 viajeros diarios. Pero la previsión es que el impulso sea superior cuando la infraestructura llegue a Santa Justa. Es ahí cuando se cree posible llegar a una cifra que esté entre los 25.000 y los 30.000 viajeros diarios.

Unión de las dos grandes zonas comerciales

Por el momento, el proyecto sirve para unir en solo 18 minutos las dos zonas comerciales más importantes de la ciudad. En el caso de Nervión también es una zona residencial y empresarial. Acuden diariamente a él miles de sevillanos para trabajar y salen del mismo otros tantos para acudir a sus puestos. 

El tranvía refuerza las conexiones de una zona donde ya operaba el Metro. El recorrido conecta además dos campus universitarios, los del Rectorado y Viapol y la Audiencia de Sevilla. Además, también enlaza con el intercambiador de Cercanías en San Bernardo.

La nueva parada del tranvía en Luis de Morales. EP Sevilla

Son, por tanto, vecinos de Nervión, los del centro y aquellos que se desplazan habitualmente entre ellos los principales beneficiado. El gran salto se prevé con la llegada a Santa Justa, donde se convertirá en un medio de transporte prioritario para todos los viajeros que lleguen a la ciudad por tren.

Obras "mal planificadas"

Las obras "mal planificadas", según ha explicado el alcalde, José Luis Sanz, se han prolongado durante tres años. El proyecto inicial contemplaba dejar la entrada a la Avenida Luis de Morales en un solo carril para la circulación común. La actual corporación ha añadido un segundo junto al de bus/taxi y así evitar el embotellamiento para los que vienen de Kansas City, donde hay tres carriles. 

En su primer día se han generado atascos, ya que todavía hay que ajustar el funcionamiento de los semáforos, tal como explicaron desde el Ayuntamiento.

Pese a ello, el alcalde defiende que la infraestructura "va a compensar" a los vecinos, quienes seguirán sufriendo molestias cuando comiencen las obras de la última fase. Por el momento, los comerciantes de Luis de Morales pueden acceder a un paquete de ayudas de 150.000 euros.

El final no tiene fecha

Con las nuevas ampliaciones por Nervión, el tranvía tiene un recorrido de 3,5 kilómetros. El trayecto total será de 4, ya que la ultima fase, la que lo llevará hasta Santa Justa es de 0,5 kilómetros.

No obstante, la inversión será el doble. La ampliación por Nervión ha costado 24 millones de euros, pero el proyecto hasta Santa Justa costará 50 millones de euros, Requiere "instalaciones nuevas" para completar la línea y un intercambiador frente a la estación de trenes que facilite la combinación de los diferentes medios de transporte que allí confluyen.

El proyecto para comenzar las obras está terminado e incluso tiene la tramitación ambiental. No obstante, no tiene fecha por la necesidad de buscar fondos europeos. Por su alto coste, el Ayuntamiento no puede asumilo en solitario, lo que frena el comienzo de las obras. Es la intervención que queda para finalizar un trayecto que tardó mucho en avanzar.

Diferentes fases

Y es que cuando fue inaugurado el 28 de octubre de 2007, el tranvía solo conectaba Plaza Nueva con el Prado de San Sebastián. Eran años de polémicas por las catenarias que, tal como denunciaban algunos vecinos, afeaban las vistas del Centro Histórico. Durante la Semana Santa había que quitarlas y el trayecto quedaba suspendido en torno al mes. Además, la retirada tenía un coste de 120.000 euros.

La solución fue encargar a la empresa fabricante unos tranvías autónomos que podían funcionar sin contacto. Empezaron a ponerse en servicio en mayo de 2010 y se retiraron la mayoría de catenarias en la mayor parte del centro. Las últimas del Prado de San Sebastián se quitaron en abril de 2024.

Ya en abril de 2011 se inauguró la ampliación del tranvía a San Bernardo, donde conecta con la red de Cercanías. No obstante, habían pasado 13 años sin avances hasta que la ampliación por Nervión se ha concretado en 2024.

Según ha indicado Sanz, se espera que la ampliación hasta Santa Justa puede ponerse en marcha a lo largo de 2025, aunque sin plazos marcados. Será el final de una obra que forma parte de la transformación que la ciudad está experimentando en materia de transporte.

Recorrido circular junto al tranvibús

Y es que mientras avanzan las obras de la línea 3 del Metro y está en marcha el estudio de la línea 2, el Ayuntamiento seguirá adelante con el tranvibús. La segunda fase se licitará en el primer trimestre de 2025.

Mientras el final de la primera, entre Sevilla Este y Santa Justa, está previsto para junio de 2025, la segunda comenzará a ejecutarse este año. Precisamente, está pensada como una continuación del tranvía en un recorrido similar al que realizará la línea 2 del Metro, a la que queda un largo recorrido.

La combinación entre tranvía y tranvibús permitirá a los sevillanos hacer un recorrido circular entre el Casco Histórico, el Prado, San Bernardo, Nervión, Santa Justa y Puerta Osario antes de volver al centro.

Ambas infraestructuras abrirán la puerta a la futura peatonalización del eje Duque-Campana. Los primeros pasos se abordarán en 2025 con la ampliación del acerado desde San Pedro hasta el Duque. Así, el nuevo año se prevé de muchos cambios en Sevilla, donde la transformación del centro está íntimamente unida a la ampliación de las posibilidades en el transporte.