A diez días para que dé comienzo uno de los eventos cofrades más importantes del siglo, ya terminan de darse los últimos retoques. El pasado 21 de noviembre, las sillas disponibles para ver la procesión se agotaron en apenas cuatro horas. Ahora se ha confirmado que, en el caso de que la lluvia impida a la hermandades recorrer las calles, el dinero de devolverá de manera íntegra y de la misma forma que se depositó.
En una rueda de prensa en la que se han dado todos los detalles del II Congreso Internacional de Hermandades, se ha confirmado que la procesión no se cambiará de día en caso de lluvia.
Si hay mal tiempo, Francisco Vélez, presidente del Consejo General de Hermandades de Sevilla, ha asegurado que las hermandades de fuera de Sevilla volverán a sus templos de manera privada. Por su parte, en el caso de las cofradías sevillanas la vuelta "deberá acordarse con el Ayuntamiento".
El presupuesto total del evento "es una cifra que está abierta", puesto que se hace con una estimación del número de asistentes, que se ha superado. Aunque el Presidente del Consejo ha defendido que "el objetivo inicial es que los gastos no superen los ingresos.
En total se destinará 1.230.000 euros a cubrir los gastos del evento y a la obra social. En lo que respecta a esta última, se le asignará un 30 por ciento del dinero. Es decir, entre 340.000 y 350.000 euros.
Durante todas las jornadas del Congreso se llevarán a cabo homilías y encuentros en varios templos de la ciudad y en la Catedral. El arzobispo de Sevilla ha confirmado que todas estarán abiertas al público, salvo la del 8 de diciembre. Además, estas también se retransmitirán.
El número de inscritos, por ahora, es de 1.832. Todos ellos provenientes de diversos países como Guatemala, México, Argentina, Italia, Suecia, Francia, Chile, Estados Unidos o Francia. Este hecho "reafirma el carácter internacional de la cita", ha añadido Vélez.