Imagen de uno de los atracos. Sevilla
La Guardia Civil desarticula a una banda muy violenta que robaba en zonas de lujo en Sevilla y otras partes de España
Los asaltantes usaban armas de fuego y estudiaban las rutinas de sus victímas. LA operación ha conseguido recuperar objetos sustraídos con valor de, al menos, diez millones de euros.
Más información: Un presunto maltratador secuestra en Sevilla a su pareja durante diez días sin darle de beber ni comer en 48 horas
La Guardia Civil ha desarticulado a un grupo criminal violento que robaba en viviendas de lujo y maniataba a sus dueños. Los agentes han recuperado objetos por valor de, al menos, diez millones de euros. Los atracadores habrían sido los responsables de, por lo menos, 16 robos en varios puntos del territorio español, entre ellos Sevilla, Cádiz, Málaga y Córdoba.
La detención se enmarca en la operación BOP, que comenzó en junio de 2024. Varios robos en la lujosa urbanización de Sotogrande fue lo que hizo sonar las alarmas.
La banda -formada por siete miembros- se caracterizaba por actuar de forma muy violenta y con armas de fuego. Además, los asaltantes estaban muy especializados, lo que les permitía burlar las medidas de seguridad.
Sevilla
El modus operandi de la banda dificultó la labor de los investigadores. Los asaltantes -de origen albanés- robaban en varias casas de manera periódica y luego regresaban a su país de origen. Una vez pasada la presión policial, volvían a España y seguían delinquiendo. Los robos de efectuaron en Cádiz, Málaga, Sevilla, Córdoba, Murcia, Alicante y Portugal.
Durante los robos, los ladrones tapaban sus caras, vestían completamente de negro y usaban guantes. Además, solo se interesaban por dinero, joyas y objetos de lujo que pudieran llevarse en las mochilas. Un vehículo de gran cilindrada y con matrículas falsas aparcado afuera les ayuda a huir.
Lingotes de oro y relojes de lujo
La operación se ha saldado con la detención de los siete miembros del grupo y la incautación de varios objetos sustraídos. En total, se intervinieron 44.500 euros, 23.700 dólares americanos y 603.000 grivnas ucranianos, así como varios lingotes de oro y numerosos objetos de marcas de lujo, como bolsos, zapatos, cinturones o prendas de ropa.
Los agentes lograron dar con el grupo criminal gracias a que varios miembros volvieron al país a la vez. Estos individuos se reunieron inicialmente en varios lugares de la geografía española, como Barcelona, Alicante, Murcia y Málaga, para finalmente establecer una "base de operaciones" en un chalet cercano a La Puebla de Cazalla, en Sevilla.
La investigación ha relevado que el grupo criminal llevó a cabo varios robos con violencia en toda la geografía española, poniendo el foco en las urbanizaciones de lujo. Los asaltantes estudiaban las rutinas de los moradores y cuáles eran las medidas de seguridad que tenían sus casas.
Enterraban las joyas
Una vez en el interior de la vivienda, los criminales no dudaban en maniatar a quienes se encontraban en el interior de ellas. Asimismo, con la intención de dar con el botín, el grupo amenazaba con armas de fuego u objetos contundentes a las víctimas.
Frutos de una serie de registros, los agentes dieron con los vehículos usados en los robos -que tenían cajas fuertes en su interior- y las herramientas utilizadas en los atracos.
También se encontraron varios teléfonos móviles y material de radiotransmisiones. Los atracadores escondían bajo tierra los objetos más valiosos. Entre estos se encontraban 35 relojes y 186 joyas, ambos de un alto valor.
