El claustro de la US remata este martes el nuevo estatuto: polémicas, enmiendas fallidas y elecciones en marzo
Aunque logró ser aprobado, el nuevo estatuto recorrió un camino tortuoso, dejando caer enmiendas relevantes como la felxibilización del sistema de elección del rector.
Más información: El claustro de la US frena las enmiendas que pedían flexibilizar los requisitos para ser rector
La Universidad de Sevilla celebra este martes una nueva sesión de claustro para rematar el último trámite legal del nuevo proyecto de estatuto.
Así, el orden del día incluye revisar el informe de legalidad de la Junta de Andalucía sobre su proyecto de nuevo estatuto, aprobado el pasado mes de diciembre por dicho órgano de la institución académica.
Un paso previo necesario para que sea después elevado al Consejo de Gobierno, órgano encargado de dar su aprobación definitiva.
Cabe mencionar que el Gabinete Jurídico de la Junta analiza este nuevo proyecto de estatuto con el objetivo de que el texto se ajuste tanto a la legislación autonómica en materia de universidades como a la Ley Orgánica del Sistema Universitario (LOSU).
Como se ha mencionado, este es el último de los trámites legales dependientes de la US necesarios para la aprobación definitiva del nuevo estatuto. Sin embargo, el camino recorrido hasta este punto no ha estado exento de polémicas.
Aunque el texto obtuvo un apoyo del 91% -superando ampliamente el mínimo de 127 votos en un claustro de 251 miembros- fue durante la votación de las enmiendas cuando se evidenció la falta de complicidad de algunos sectores de la comunidad universitaria con la actual mayoría que apoya al rector.
De hecho, dicha votación de enmiendas se celebró a lo largo de dos días desde el pasado 26 de noviembre, prolongándose durante más tiempo del que estaba previsto. Y aunque se saldó con la aprobación de 16 de un total de 32 enmiendas que habían llegado a esta última fase, se discutieron varias cuestiones relevantes que no fueron avaladas.
Sistema de elección del rector
La enmienda que causó mayor expectación fue la que determinaría los requisitos para optar a ser rector, recogidos en el artículo 24.2 del proyecto de estatuto,
Dichos cambios debían adaptar este sistema a la nueva Ley Orgánica del Sistema Universitario (LOSU), que exige "tres sexenios de investigación, tres quinquenios de docencia y cuatro años de experiencia de gestión universitaria en algún cargo unipersonal".
Tal y como relató a EL ESPAÑOL de Sevilla el claustral Luis Ángel Hierro, en el primer texto del nuevo estatuto de la US, la Comisión de Proyectos Normativos encargada de su confección sustituyó la palabra "cargo" por "órgano" unipersonal.
Ese concepto está legalmente definido, explicó, como aquel que realiza gestiones que pueden "afectar a terceros" o que es fruto de una "decisión directa de la administración pública".
Ese cambio de concepto, según Hierro, "restringía mucho" el tipo de "experiencia de gestión" contemplada en las candidaturas. Además, existen "muchos menos" órganos que cargos en la Universidad.
Aunque en un principio se defendió desde la Comisión que ambos términos "eran lo mismo", Hierro cree "que no lo son". En el término del "cargo unipersonal" que defiende, se incluyen otros "importantes" para la US que manejan "más presupuesto" que los decanos, secretarios de departamento o vicerrectores.
Estos son, por ejemplo, los investigadores principales de los proyectos de investigación o los "directores de títulos o máster propios". Ahí empezó la "disputa" que el propio Hierro y otros de su opinión tuvieron con sus colegas del claustro de la Hispalense.
Juego de palabras
Así las cosas, para la mencionada votación del pasado 26 de noviembre se presentaron cuatro enmiendas a este respecto: las número 34, 36, 37 y 39. De ellas, Hierro presentó dos: la 34, que sustituye el término "órgano" por "cargo", y la 39, en la que define qué son esos cargos unipersonales, con criterios "bastante amplios".
Otra de las enmiendas, la número 36, es igual a la 34, sólo que, según Hierro, estaba "pactada con el rectorado" por otros miembros del claustro, e incluye el concepto "cargo unipersonal", pero añadiendo la coletilla "contemplado en este Estatuto". Así, afirmó Hierro, se "cierra" al concepto de cargo que ya estaba presente en el texto.
Finalmente, el claustro aprobó las enmiendas 36 y 34 porque "eran lo mismo", y rechazó la 39, "que definía qué tipo de cargos" entraban en el concepto. Este resultado, defiendió Hierro, "es negativo porque se desincentiva al personal universitario a ejercer funciones" como las citadas anteriormente.
De facto, este movimiento del claustro de la Universidad de Sevilla ha dejado fuera de la carrera por el puesto de rector a Manuel Marchena, exgerente de Urbanismo del Ayuntamiento de Sevilla y que pretendía presentar candidatura.
Sin parciales
Otras de las enmiendas que más habían sonado en los días previos a esta votación eran, por un lado, las propuestas por los estudiantes y que incluían la evaluación compensatoria y el establecimiento del derecho a la realización de exámenes parciales.
Por otro, la petición de una claustral para suprimir las capillas de la Universidad de Sevilla. Sin embargo, ninguna de ellas ha sido aprobada por el claustro de la Universidad.
Un claustro de 300
Entre las enmiendas que sí serán incorporadas al texto del proyecto del estatuto de la US, las más relevantes son las que versan sobre la composición del claustro.
Si este texto es aprobado finalmente por el Consejo de Gobierno, tras su entrada en vigor el claustro pasará de 252 miembros a un total de 300.
Elecciones en marzo
No obstante, aunque la mayoría de miembros del actual claustro apoyan al rector de la Universidad de Sevilla -tal fue el resultado de la votación del estatuto-, el mandato de Miguel Ángel Castro caduca este año.
De hecho, a principios del mes de diciembre, Castro se apresuró a negar las afirmaciones que partían del catedrático Manuel Marchena y que lo acusaban de querer "alargar" su mandato ilegalmente.
Castro insistió entonces ante los miembros del Consejo de Gobierno que se está abordando el desarrollo electoral "siguiendo la legalidad establecida en la universidad", afirmando que el nuevo estatuto fue remitido a la Junta el pasado 5 de diciembre y que, a partir de ahí, todo el proceso hasta la publicación en BOJA debería producirse en un plazo máximo de cuatro meses.
En consecuencia, aseguró las elecciones a nuevo rector se convocarán una vez se publique el nuevo estatuto. Esto es, previsiblemente y si todo sigue su curso habitual, en marzo.