Entraron en una casa del Viso del Alcor, en Sevilla para robar. Sabían que dentro estaban tres mujeres de 61, 63 y 88 años solas y aprovecharon esa circunstancia para desvalijarlas tras amenazarlas. 

Los hechos ocurrieron a finales de 2023. Entonces, cuatro encapuchados entraron en el domicilio donde estaban las mujeres. La familia celebraba una boda y tenían conocimiento de que no habría nadie más en el domicilio. 

Según fuentes de la Guardia Civil, los ladrones, que eran cuatro, habían realizado tareas de vigilancia de la casa antes de ir a robar. De hecho, un vídeo de cámaras de seguridad cercanas al domicilio muestra cómo una mujer les guía hasta la casa.

Esa mujer, sospechan los agentes, es quien habría avisado de la situación en al casa y facilitado el robo. De los cuatro ladrones, señalan fuentes de la investigación, tres de ellos están detenidos. El cuarto habría huido a Medellín, en Colombia, de donde es natural. 

Una vez dentro del domicilio, los ladrones usaron "violencia e intimidación" señalan los agentes de la Guardia Civil, "maniatando y amordazando a las personas que allí se encontraban".

Con un cuchillo en el cuello

Las víctimas fueron maniatadas y amordazarlas, llegando los presuntos autores de los hechos a amenazar con un cuchillo en el cuello a una de ellas, utilizándola como señuelo con el fin de que el resto les facilitará la información de la ubicación del dinero y joyas que hubiera en la vivienda.

Los agresores retuvieron contra su voluntad cerca de una hora a las víctimas, las cuales, aterrorizadas ante la situación y las amenazas, no podían pedir auxilio; abandonando los autores a sus víctimas en el interior de la vivienda una vez conseguido el botín, logrando zafarse una de ella de sus ataduras y pedir socorro.

Fruto de las investigaciones realizada por los agentes, lograron identificar a los componentes de un grupo criminal. Los detenidos estudiaban de forma minuciosa a sus víctimas con el fin de obtener información sobre su vida cotidiana y bienes que pudieran guardar en su vivienda, adoptando estrictas medidas de seguridad para evitar ser identificados.

Para ello, los presuntos autores del robo comprobaban durante varios días a las personas que accedían a la vivienda, así como las medidas de seguridad del lugar, las posibles vías de huida, etcétera.

Posteriormente, junto con otros miembros, llevaban a cabo el robo, utilizando la violencia necesaria para lograr su objetivo. Las investigaciones continúan abiertas, centrándose en la localización de una cuarta persona que, al parecer, huyó a su país de origen siendo natural de Medellín (Colombia).