
Imagen de archivo de dos agentes de la Policía Nacional. Sevilla
Salvan en Sevilla a una mujer y a su hija de la persecución de su expareja en coche: la intentó sacar de la carretera
La víctima se puso en contacto mientras conducía con la sala coordinadora de la Policía Nacional, que activó a sus agentes para detener al agresor.
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La Policía Nacional ha detenido a un hombre que siguió a su expareja en coche e incluso intentó sacarla de la carretera.
El arrestado realizó "peligrosas maniobras de conducción". Le cerró el paso al vehículo e incluso hizo los intentos de desplazarla de la vía. Todo ello, pese a que en el interior viajaba su propia hija de siete años, producto de la relación entre ambos.
Los hechos se registraron este martes. Todo nació a raíz de una discusion, indican fuentes policiales. La mujer fue a recoger a su hija a la localidad de La Rinconada, donde había quedado con su ex, también padre de la menor.

Se marchó con la menor en su coche, pero se percató instantes después de que su pareja le perseguía con otro vehículo.
Fue entonces cuando entraron en acción los agentes de la Policía Nacional, que recibieron el aviso a través del Centro de Inteligencia de Mando Coordinación CIMACC091 de Sevilla.
Pese a que estaba conduciendo, la víctima consiguió llamar a la Policía Nacional. Pudo mantener un contacto directo con los operadores telefónicos para relatarles las maniobras de su ex.
Según revela el relato policial, alertó de "una serie de peligrosas y agresivas maniobras tendentes a evitar su circulación". En un momento dado, llegó a cerrarle el paso y a sacarla de la calzada por momentos.
Los operadores fueron informado en todo momento a los indicativos policiales sobre las posiciones de la mujer. Dicha coordinación fue clave, según explican desde el cuerpo, a la hora de poder interceptar al agresor y anular la amenaza sobre la mujer y su hija.
Auxilio y coordinación
Este modo de proceder fue el que se desarrolló el pasado mes de abril cuando una mujer llamó a la Policía Local y simuló pedir pizza a las 3 de la mañana. El agente se percató de la extraña situación y descubrió que estaba siendo retenida en contra de su voluntad, pidiéndole respuestas de 'sí' o 'no'.
Dicha situación se transmitió a la Policía Nacional, que envió a agentes de paisano para comprobar la situación y detener al presunto agresor.
Como ha sucedido ahora, se coordinaron dos cuerpos policiales para auxiliar a una víctima cuando estaba retenida en contra de su voluntad.