La hermandad del Cerro del Águila fue la primera en iniciar su camino a la Catedral en la jornada del Martes Santo.
Desde uno de los barrios más populares del extrarradio de Sevilla, cientos de vecinos y casi dos mil nazarenos, acompañaron a la cofradía en su estación de penitencia.
La leve lluvia y el frío no impidieron que se repitiesen las clásicas estampas familiares en torno al recorrido de ida de esta joven cofradía.
[Crónica del Martes Santo: Tarde invernal para un día que le ganó el pulso al cielo en Sevilla]
Los pasos de Jesús de la Humildad, el Cristo del Desamparo y Abandono y Nuestra Señora de los Dolores, llegaron un año más al corazón de Sevilla.