Sevilla

Sevilla ofrece multitud de planes con los que amenizar la vuelta a la rutina. Experiencias gastronómicas, rutas sobre curiosidades de la ciudad o boleras y salas de arcade son algunas de las opciones que despacha la hispalense.

Ahora, a las gigantescas salas recubiertas de colchonetas hinchables les ha salido un duro competidor. Acaba de aterrizar una empresa desde Estados Unidos, concretamente Carolina del Sur, que promete teletransportar a todo aquel que la visite a sus años de infancia.

Se trata de FANBUX que, de la mano de Productores de Sonrisa, ha traído a Sevilla el parque hinchable más grande del mundo. En total, esta ciudad de vibrantes colores cuenta con 4.000 metros cuadrados de colchonetas.

Este espacio inflable ya ha visitado Madrid, Barcelona y Valencia, y ahora es el turno de Sevilla. Será a partir del 20 de septiembre cuándo la empresa estadounidense arranque su andadura en la ciudad andaluza. Una aventura que tiene fecha límite: el 11 de noviembre.

La instalación, situada en el recinto de la feria, tiene como público principal a los más pequeños, a los que promete provocar más de una carcajada. Sin embargo, desde FANBUX tampoco se olvidan de los mayores. A ellos les garantiza el retorno a su infancia.

Áreas distintas

El parque hinchable cuenta con un total de diez áreas distintas en las que se podrán encontrar diversas atracciones. Entre ellas están un tobogán de siete metros de altura, zonas de descanso o laberintos que aseguran hacer pasar más de un apuro a quienes se atrevan a desafiarlos. 

La travesía por la ciudad hinchable durará 80 minutos y su precio será de diez euros, aunque los viernes y domingos se activará un descuento del diez por ciento. La atracción se podrá visitar cualquier día de la semana en un horario comprendido desde las 10,00 hasta las 20,30 horas. 

Para asegurar el acceso al parque, las entradas estarán disponibles a través de la página web de FANBUX, ya que desde la empresa avisan de que "suelen agotar las entradas". Además, se debe llegar 30 minutos antes de la hora asignada en el pase. 

Los niños menores de 12 años deberán ir acompañados por un adulto que también tendrá que abonar su entrada al parque. Al igual que en el resto de atracciones de este tipo, el uso de calcetines es obligatorio. Estos se pueden traer de casa o comprar allí.