Esta es la empresa que está detrás de los mantecados de marca blanca de Aldi: son exquisitos y se hacen en Sevilla

Los mantecados son uno de los dulces más representativos de la Navidad en España. Su origen está profundamente ligado a la tradición andaluza, especialmente a ciudades como Estepa y Antequera, que son conocidas por su producción masiva de este manjar. Su textura suave y desmenuzable, junto con su inconfundible sabor, los convierte en un imprescindible de las mesas navideñas.

Sin embargo, cabe destacar que se ha producido un aumento en la compra de mantecados de marca blanca, que responde a varios factores relacionados con las preferencias, el presupuesto y las tendencias de consumo actuales. 

Un ejemplo son los mantecados de Aldi, que con la marca "La Flor de Navidad" son elaborados por La Fortaleza, una de las fábricas más importantes de dulces en Estepa, considerada la cuna del mantecado.

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Los mantecados de marca blanca que venden en ALDI, bajo la denominación "La Flor de Navidad", han ganado bastante popularidad, especialmente durante la campaña navideña. Estos mantecados son una opción económica pero de calidad, producidos por La Fortaleza, una de las fábricas más destacadas de Estepa, la región por excelencia en la elaboración de mantecados y polvorones.

Además, los mantecados de "La Flor de Navidad" incluyen varios sabores típicos, como los clásicos de canela, limón, almendra y cacao. También se suelen ofrecer combinaciones o ediciones especiales para la temporada navideña, como mantecados con rellenos de crema o con sésamo.

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Entre las opciones disponibles se encuentran el mantecado artesanal, el polvorón de almendra (que contiene un 10% de este fruto seco según sus ingredientes), el mantecado de aceite de oliva (con un 23% de aceite de oliva virgen extra), el mantecado de limón, el mantecado de coco y el mantecado de cacao. Además, también se pueden encontrar otros productos como el rosco de vino y almendras, todos a un precio a granel de 4,99 euros por kilo.

A pesar de ser una marca blanca, los mantecados de ALDI mantienen una buena calidad, gracias a la producción en La Fortaleza, una de las fábricas con más experiencia en Estepa, donde se elaboran mantecados desde hace generaciones. Los ingredientes como la manteca de cerdo, la harina y el azúcar se combinan cuidadosamente para obtener la textura característica de los mantecados, suave y desmenuzable.

Los mantecados de ALDI son mucho más baratos que los de marcas conocidas, lo que los convierte en una opción atractiva para aquellos que buscan disfrutar de este dulce típico navideño sin gastar demasiado.

Generalmente, los mantecados de ALDI se venden en paquetes de diferentes tamaños, lo que permite a los compradores elegir según sus necesidades. Los paquetes tienen un diseño sencillo pero atractivo, y son ideales tanto para consumir en casa como para regalar durante las fiestas.

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ALDI trabaja con fabricantes locales, como La Fortaleza, lo que ayuda a mantener la tradición de los mantecados de Estepa. Esto también implica que los productos son elaborados bajo estándares de calidad que cumplen con la tradición y los gustos españoles.

¿Por qué elegir los mantecados de ALDI?

• Relación calidad-precio: La opción perfecta para quienes buscan un buen mantecado navideño sin pagar precios elevados.
• Conveniencia: Están disponibles en todos los supermercados ALDI y son fáciles de encontrar durante la temporada de Navidad.
• Tradición: A pesar de ser una marca blanca, la calidad de estos mantecados es similar a la de las marcas más conocidas, lo que los convierte en una opción confiable para disfrutar de los sabores navideños.

En resumen, los mantecados de "La Flor de Navidad" de ALDI son una excelente opción para quienes buscan disfrutar de los tradicionales mantecados de Estepa a un precio más accesible sin renunciar a la calidad.

El origen de los mantecados

Los mantecados tienen su origen en Andalucía en el siglo XVI. Se dice que surgieron debido a la abundancia de manteca de cerdo en la región, un subproducto común de la matanza del cerdo.

Los monjes de los conventos andaluces comenzaron a elaborar estos dulces y pronto su popularidad se extendió por toda España. Durante el siglo XIX, con la llegada del transporte ferroviario, Estepa comenzó a consolidarse como el epicentro de la producción de mantecados.