27 cosas por las que la vuelta al cole era un acontecimiento brutalmente memorable
En la jungla. Repasamos algunos de los motivos por los que para muchos alumnos de primaria e infantil el retorno a las aulas puede llegar a ser uno de los mejores días del año.
12 septiembre, 2016 08:11Noticias relacionadas
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Cierto. Según el calendario escolar de cada comunidad autónoma, y en función de las edades de los escolares, algunos alumnos de primaria e infantil ya habrán empezado el colegio hace días mientras que a otros les queda más de una semana hasta que se incorporen.
Vamos, que hablar de vuelta al cole no es hacerlo de una fecha conmemorativa concreta sino más bien de un conjunto de sensaciones que se entremezclan estrepitosamente en la mente de uno cuando se da cuenta de que ya está aquí -ya llegó- el retorno a su vida estudiantil y el fin de los días de verano. Y para algunos, esto no supone un drama.
Son muchos los que sacaban y sacan el lado más positivo de este acontecimiento bestial que te trastoca la vida cuando estas en edad escolar. ¿Coincides con algunos de sus motivos?
Proffesional shopper del material escolar
1. Son los días de gastar los corticoles - que no corticoides, como muchos consumidores mágicos suelen decir- en cosas innecesarias.
2. Pánico total ante el momento de forrar los libros de texto sin que queden burbujas ni arrugas (¿posible deporte olímpico?).
3. Hace acopio de fotos de tus ídolos para pegarlas en tus archivadores y carpeta.
4. Para los más pro: ir señalando las asignaturas en los separadores de la carpeta clasificadora.
5. Colocarlo todo en la mochila (que ya pesa cerca de seis kilos).
Familia, nos vemos
6. Pese a la noche de insomnio radical que te espera el día antes,
7. Tal día como hoy se da la liberación paternal,
que empiezas a vislumbrar se da en ambos sentidos.
Día de estreno (o déjà vu total)
8. Estrenas mochila,
9. las gomas de borrar Milán están nuevas,
10. disfrutas del olor de las páginas de tus recién comprados libros de texto,
11. tus bolis Carioca aún no están secos,
12. y las tapas de tus bolis aún están impolutas sin mordisco alguno.
13. Escuadra y cartabón: los dos que nunca faltan y jamás usarás.
14. Es el único momento del año en el que el set de tu compás está al completo (despídete de la cajita de las minas y demás accesorios).
15. Y, ¡sí! El típex funciona porque aún está sin grumos ni trozos resecos que impiden cerrarlo (y/o abrirlo).
Amigos para siempre
16. Vuelves a ver a tus amigos (y recordar la cara de tus peores enemigos).
17. Empieza la ronda de dedicatorias en tu carpeta. ¿Cuántas caerán?
Casi seguro esta.
Y esta fijo.
Vaya verano, mach@
18. Porque fardas de moreno
19. y enseñas las heridas que te has hecho en vacaciones: “¡Esta fue en el aquapark de mi pueblo!”, y a mucha honra.
Amores de aula
20. Porque vuelves a ver al niñ@ que te gustaba (tú, y media clase de 5ºB... aquello era un auténtico sex-symbol, y lo sabes)
21. y a tu profe “preferida”.
A tope de emoción con el cambio de aula
22. ¿Quién será tu nuevo profesor?
23. Descubrir los secretos de tu nuevo pupitre (número de chicles, agujeros y anotaciones indescriptibles escritas con edding o típex),
24. ver qué se esconde en tu “nueva” cajonera. ¿Te habrá tocado la que tiene la firma tallada en madera de El Chino?,
25. Salir al recreo y descubrir las novedades (columpiles o banquiles) así como la oferta gastronómica que ofrecen los kioscos y las tiendas de frutos secos cercanas).
26. O darte cuenta de que no hay novedades en el menú del comedor y consolarte con el clásico “más vale malo conocido que bueno por conocer”.
27. Y sí: esperar ansioso a que suene el timbre y finiquitar este sinfín de emociones.