Llevas toda la vida sentándote mal en el váter y no tenías ni idea
En la jungla. Una cuenta de Facebook retoma esta vieja cuestión científica y se convierte en todo un fenómeno con más de 40 millones de reproducciones.
23 septiembre, 2016 13:39Noticias relacionadas
El tipo que registró la patente del retrete que todos tenemos en nuestros hogares se ha forrado a nuestra costa y de mala manera. Porque lo hizo mal. El escusado que diseñó, con asiento, cisterna a la espalda, y un sistema de sifón que impide el paso de los olores, tiene buena parte de la culpa de los problemas de estreñimiento de medio mundo.
Semejante afirmación no parte de nuestra singular capacidad para analizar cualquier tipo de fenómeno, sino de la ciencia y de un vídeo que se ha convertido en un auténtico fenómeno en apenas 10 días por volver a retomar este delicado tema. Lo publicó la cuenta de Facebook Tipo Sano el pasado 13 de septiembre y ya ha superado los 40 millones de reproducciones y se acerca al millón y medio de compartidos.
El vídeo comienza con una afirmación tan categórica como realista: "Toda tu vida te has sentado mal en la taza del váter". Posar los brazos sobre las rodillas mientras uno aborda cada día (con un poco de suerte) esa liturgia del 'momento All-bran' o hacerlo con la espalda recta es poco saludable. En esta posición, nuestro tronco y nuestras piernas forman un ángulo de 90 grados, tal y como señalan en Tipo Sano, y se acaba comprimiendo y bloqueando el conducto natural del intestino. ¿Las consecuencias? Nefastas: síndrome del intestino irritable, hemorroides e incluso cáncer.
Lo ideal sería cagar (hablemos en román paladino de una vez) en cuclillas, adoptando una posición de 35 grados. Esta postura, tal y como se afirma en el vídeo, es completamente normal en numerosas culturas y en el mundo animal, pero no tanto entre los humanos. Así, desde que asistimos a la extinción del llamado "inodoro a la turca", nos vemos obligados a hacer tremebundos esfuerzos sobre un váter mal diseñado para nuestro quehacer diario.
Las soluciones podrían ser varias: desde acometer una reforma 'vintage' de nuestro baño y volver al anterior tipo de retrete hasta subirnos a la taza del váter para conseguir los 35 grados ideales para que todo fluya de forma natural. Como esta última solución, que requiere tener cierto sentido del equilibrio, puede jugarnos alguna mala pasada, en el vídeo recomiendan tener un taburete (del tamaño de un escalón) a mano, de tal manera que nos podamos sentar sobre el váter y subir los pies al mismo.
La ciencia ya lo avisó
En realidad, que nuestros váteres no están diseñados para nuestros intestinos o -en modo más prosaico- que cagamos mal no es un hallazgo novedoso. La ciencia lo lleva avisando desde hace años. Henry L. Bockus, maestro de la gastroenterología y experto en la materia, ya lanzó el aviso allá por 1974 en su libro 'Gastroenterology': "La postura ideal para defecar es la posición de cuclillas, con los mulsos flexionados sobre el abdomen. De esta manera disminuye la capacidad de la cavidad abdominal y aumenta la presión intraabdominal, que favorece la expulsión". También el médico francés Frédéric Saldmann abordó la cuestión con un ejemplo gráfico como el de una manguera de riego estrangulada.
Así, la doctora alemana Giulia Enders publicó allá por 2015 un libro que se convirtió en el libro de cabecera de los estreñidos del mundo y que vendió más de un millón de ejemplares en el país germano: 'La digestión es la cuestión'. En él abordaba de nuevo la cuestión desde una óptica divulgativa. Una forma de entender la fisiología humana y nuestro intestino ante el retrete que ya le sirvió para hacerse con el primer premio del 'Festival Science Slam'.
Sea como fuere, lo cierto es que desde hace algún tiempo algunas empresas han encontrado un nicho de negocio importante en el diseño de taburetes para el váter, con distintos tamaños y precios. Todo con tal de conseguir que tengamos una "vida feliz". Porque, tal y como señalan, "la gravedad es tu aliada".