Hubo una época, bueno y aún sucede para qué negarlo, en la que Rick Astley era sinónimo de trolleo. El modus operandi era sencillo: alguien te pasaba un enlace con un título en clave clickbait ("tienes que ver esto, vas a flipar") y al abrirlo, el enlace te llevaba al vídeo de "Never gonna give you up". Lo que se conocía como un "You've just got rickrolled".
Pues bien, ayer alguien colgó un vídeo en Youtube de un concierto de los Foo Fighters donde aparece Rick Astley como "estrella invitada". Yo creo que él estaba en el concierto un poco piripi y le dijo al segurata del backstage: "déjame entrar que soy colega de Dave Grohl" y de alguna manera funcionó porque el líder de la banda reconoce al principio del vídeo que ha conocido a Rick apenas dos minutos antes.
El caso es que uno se pregunta qué hacen en el escenario una banda tan respetada como los Foo Fighters y el bueno de Rick, porque claro, unos son los Foo Fighters y otro es, bueno, es Rick Astley. Pero en cuanto suena la música, todo cambia.
No es la primera vez
El caso es que el músico británico tiene más virtudes que la de una sola canción. Es normal verlo en sus conciertos y actuaciones versionar temas de otros artistas. Es bastante popular, por ejemplo, el homenaje que le hace a AC/DC y su "Highway to hell".
Pero no hace falta irse a los clásicos, también es capaz de versionar temas más actuales como el "Somebody told me" de The Killers.
También toca palos más comerciales como esta versión del "Uptown funk" de Bruno Mars que interpretó en directo en la televisión neerlandesa RTL.
Para rematar, Rick sabe lo que la gente quiere y no duda en darles la canción que levanta pistas desde 2013 el "Get lucky" de Daft Punk. Solo que esta vez decide añadir un giro inesperado y es que al final de la canción añade parte del tema "I should be so lucky" deKylie Minogue, al más puro estilo mashup.