A Donald Trump aún le queda mucho mandato como para vaticinar un desastre en sus políticas, pero no hay duda de que sí es un éxito con la polémica. También en sus constantes guerras con científicos, artistas, escritores... Como Stephen King, enemigo declarado de Trump desde antes de que el candidato entrase en campaña electoral. Las puyas han sido constantes entre ambos, cada uno a su manera: Stephen cargando públicamente contra Donald; Trump bloqueando en Twitter a King.
Lejos de considerar el bloqueo como una afrenta Stephen King ha respondido con un tweet en el que hace uso del sarcasmo, algo a lo que acostumbra. El escritor ha bloqueado al presidente de ver IT o Mr. Mercedes, recientes adaptaciones de sus obras. "No hay payasos para ti, Donald. Suicídate".
Hacer un repaso por el Timeline de Stephen King implica leer toneladas de críticas a Donald Trump, tanto veladas como directas. El escritor, famoso por no cortarse en sus libros, tampoco lo hace de manera pública. Y ataca en el medio donde Donald Trump se siente tan a gusto como Maine en las novelas de King: Twitter.
Aunque Stephen haya vuelto con la broma del bloqueo este no es nuevo: Donald Trump ya le bloqueó en junio de este año. Como no iba a ser menos, el escritor lo comunicó públicamente con una ración de sarcasmo. "Trump me ha bloqueado de leer sus tweets. Voy a suicidarme". El suicidio es un tema recurrente en el escritor.
Recibió un gran aluvión de respuestas, entre ellas de J.K. Rowling, autora de Harry Potter. La escritora se comprometía a enviar a Stephen capturas de los tweets de Donald Trump. Como muchos otros autores, Rowling también ha batallado en contra del presidente actual de Estados Unidos.
La lucha de comentarios y bloqueos va para largo ya que Stephen King no cesará en sus críticas a Trump. Quién sabe, quizá hasta lo convierta en personaje de alguna de sus novelas. Un presidente que desaparece de manera misteriosa y un cadáver descubierto por unos niños en alguna casa destartalada a las afueras a Maine, aquí hay argumento.