Cuando alguien se dedica a insultar, a mentir y a molestar en foros de Internet o en redes sociales se le suele apodar como un trol. Para muchos, Donald Trump, 45º Presidente de EEUU, encaja a la perfección con tal definición. Se puede decir que es el comandante en jefe de los trols.
Pero incluso el rey de los trols puede ser troleado. Eso es lo que han hecho dos artistas, que han decidido atacar al presidente donde más le duele: en su merchandising. Para ello han tirado de los dos grandes puntos débiles del millonario: su conexión rusa y la tibia denuncia de los disturbios racistas que tuvieron lugar en Charlottesville.
Y es que no han tenido mejor idea que colocar en la tienda de recuerdos de la Torre Trump, llena de todo tipo de artefactos con la efigie del amigo Donald, unas capuchas del Ku Klux Klan y postales del presidente ruso Vladimir Putin.
Además, también han colocado banderas rusas y chubasqueros -posiblemente en referencia a aquel episodio no confirmado que juntaba a Trump, dos prostitutas rusas y lluvia dorada-.
"Pensamos que los turistas que entrasen en la tienda, especialmente aquellos de otros países, necesitaban ver la historia completa de nuestro presidente, porque los productos de la tienda no reflejan adecuadamente a la persona", explicó uno de los artistas a Gothamist.
La revista también preguntó a los responsables de esta acción si la administración Trump era demasiado absurda para ser satirizada, el artista reconoció que sí. "Mi compañero estaba colocando varios objetos y comentó a un alguien '¿oye, has visto esto?', y no se sorprendió".