La temeraria conducción de este camión espanta a las redes sociales
En la Jungla. Un usuario graba un camión conduciendo de manera tremendamente temeraria, invadiendo el carril contrario, e incluso derrapando en las curvas.
1 septiembre, 2017 10:08Las prisas nunca son buenas, y conducir un camión como si estuvieras en el Rally de Montecarlo no parece la mejor solución a llegar tarde -siempre es mejor llegar tarde que no llegar, o hacer que alguien no llegue por tu culpa-. El pasado 29 de agosto, un usuario grabó a este vehículo, perteneciente a la empresa de transportes Sesé.
EL vídeo fue grabado en la carretera desde Sant Sadurní a Martorell, como explica el propio autor del vídeo, y no solo el propio conductor tuvo suerte, sino también los conductores que circulaban en dirección contraria, carril que este chófer no evitaba invadir de forma continua, con derrapes que espantarían a Carlos Sáinz.:
La publicación, en Facebook, acumula cerca de los dos millones de reproducciones y más de 30.500 compartidos. Al ser instado por otros usuarios a que lo enviase a la empresa propietaria del camión, Daniel asegura que ya lo tienen.
Alquilar un Ferrari para estamparlo contra el guardarraíl
Al conducir de forma temeraria pones en riesgo no solo tu vida, también la de los que comparten la carretera contigo, no importa que lleves un camión o un superdeportivo de lujo. Para concienciar de este hecho, la empresa Oxotic -dedicada al alquiler de superdeportivos y experiencias de conducción- publicó un vídeo que demuestra el grave riesgo de sobrevalorar tu habilidad al volante.
EL vídeo se grabó en una carretera de Colorado (EEUU) el pasado enero. En él, se puede oír claramente como la acompañante tiene más sentido común que el joven de 26 años que conduce. Justo antes del golpe, deja espacio con el coche que le antecede para disponer más metros para acelerar. ¿El resultado? Tal y como explican en Jalopnik Toma una curva de 50 km/h a una velocidad de 144, trata de frenar demasiado tarde y se va directo al guarda raíl. Y un coche de 250.000€ destrozado.
El joven y su acompañante salieron ilesos. "Acabo de perder mi licencia", exclama entre maldiciones. Y suerte tuvo que solo fue eso.