Aterrorizan a un pueblo al estilo 'It' atando globos rojos
En la Jungla. Unos misteriosos globos rojos aparecen en las alcantarillas de un pueblo estadounidense. La policía, asustada, se esfuerza en retirarlos. Parece un libro de Stephen King, pero sucedió.
7 septiembre, 2017 12:26La segunda adaptación cinematográfica de uno de los mayores bestsellers de Stephen King se presenta este fin de semana en los cines de Estados Unidos. El payaso Pennywise y los globos rojos se han convertido en uno de los mejores representantes de la película además de en objeto de nuestras pesadillas, por lo que todos pensaron que la aparición de globos atados a las alcantarillas formaba parte de la promoción de It. Esos misteriosos globos rojos aparecieron en Lititz, Pennsylvania. Y aterrorizaron a la policía, tal y como ellos mismos comentaron en una actualización de Facebook.
"... queremos que el bromista local sepa que estamos tan terroríficamente asustados que hemos retirado los globos de las alcantarillas y le pedimos respetuosamente que no lo vuelva a hacer". Policías asustados de unos globos rojos, podría pertenecer a un capítulo de los Simpson.
¿Quién ató los globos a las alcantarillas? ¿Fue realmente la productora de la película It? ¿Vino Stephen King desde Maine para escenificar la peor de nuestras pesadillas? Resulta que no se trataba de ninguna campaña de marketing y sí de un grupo de bromistas: 5 chicas que, armadas con unos globos rojos rellenos de helio, hicieron de la noche su parapeto atándolos en las calles de Lititz la madrugada del pasado martes.
"Queríamos gastarles una broma a nuestros amigos y terminamos asustando a América". El tweet de Peyton Reiff, una de las bromistas, muestra imágenes de la travesura junto al resto de sus amigas.
We tried to trick our friends but ended up scaring America! #redballoonlititz 🎈 pic.twitter.com/hbLSCxv6GV
— Peyton Reiff (@PeytonReiff) 5 de septiembre de 2017
En conversaciones con Mashable Peyton asegura que todas están asombradas del alcance que ha tenido su broma. En ningún momento quisieron asustar a la policía, tampoco al resto de la ciudad: fue una broma de un grupo de adolescentes que celebraba el fin del verano. Stephen King seguro que ha tomado nota para su próxima novela.