Según podemos leer en el Independent, la CIA desclasificará en las próximas semanas una serie de documentos que fueron incautados en la operación que acabó con la vida de Osama Bin Laden. Fue en 2011 cuando el jefe ideológico del mayor atentado en suelo estadounidense fue asesinado por un comando de SEALs americano.
En la operación se incautaron numerosos documentos tanto físicos como digitales y que tratan de diversos temas. Desde la historia del Islam hasta cartas familiares pasando por libros o notas sobre las operaciones de Al-Qaeda. Aunque también se encontró un buen puñado de porno.
Las autoridades estadounidenses están valorando la opción de desclasificar los documentos pero no quieren publicar información sensible que pueda animar o crear nuevos actos terroristas. Tampoco quieren publicar material con derechos de autor ni el porno.
¿Por qué?
Y llegados a este punto me pregunto por qué. ¿Cuál es el motivo para no querer publicar el porno? ¿Tan oscuro es? O algo peor, ¿tan normal es? Igual si en internet la gente ve el mismo porno que Bin Laden lo humanizan de algún modo. No se, internet en estos días es un lugar muy raro.
De todos modos, a mí lo que me parece que pasa aquí es un claro caso de compañerismo masculino. Recordemos que Bin Laden tuvo seis esposas, cuatro de ellas simultáneamente, y que por muy terrorista que seas, tener un archivo secreto de porno es difícilmente justificable ante tu mujer. Imagino una escena similar, cuando los soldados registraban su escondite en las montañas:
- Capitán, hemos encontrado el portátil de Bin Laden.
- Bien. Dime qué carpetas ves.
- Ataque Torres Gemelas, Decapitaciones, Bin Laden + buscado, facturas, Manual para conquistar occidente, Sucios perros americanos
- Mira en facturas a ver qué hay.
- Hay porno, señor. 200GBs.
- Pobre hombre, tanto tiempo aquí solo. Sí que debió aburrirse.