¿Puede un hombre estar 91 horas con una erección continuada? Al parecer sí. O al menos así lo cuenta un recluso norteamericano que ha demandado a la penitenciaría del condado de Pitssburg por 5 millones de dólares por no haberle hecho caso e, incluso, haberse burlado de su problema.
Según podemos leer en el Tulsa World. Dustin Lance ingirió una pastilla que un compañero le ofreció cuando estaba en la cárcel y, a raíz de eso, tuvo una erección continua. Por más que se lo comentase a los alguaciles o al personal de la prisión nadie le hacía caso. Algunos guardias incluso se burlaban de él y hacían bromas con la situación.
Después de 4 días el personal de la prisión de Pittsburg decidió llevar a Dustin al hospital para que fuera tratado. Allí lo derivaron a un urólogo ya que no podían solucionar el problema. Lamentablemente, el personal de la prisión decidió devolverlo a su celda.
Pero aquí no acaba la cosa. Como comentaba antes, Dustin Lance demandó al condado y a la prisión de Pittsburg por negligencia y éstos han respondido al juez que desestime la demanda por encontrarse el demandante muerto. Según parece, la demanda fue interpuesta por el abogado de Dustin que ha respondido que sí que está vivo y que aportará pruebas de ello.
Sin embargo, el periódico que recoge esta historia no pudo ponerse en contacto con Dustin Lance para corroborar que estuviese vivo de verdad.