Esta persecución policial sería como otras tantas que hemos visto en películas si no fuera por un pequeño detalle: el conductor del vehículo huido tiene la tierna edad de 10 años. Si la situación de un niño huyendo de la policía por la autopista no es lo suficientemente surrealista, un segundo vehículo le daba caza: su madre.
La persecución duró algo menos de una hora y se prolongó durante casi 20 kilómetros, llegando a alcanzarse velocidades de 140 km/h. Para más inri, según FOX News era la segunda vez en dos semanas que el pequeño se fugaba de casa en coche, concretamente en un Toyota Avalon propiedad de la pareja de su madre.
Las grabación de la llamada que alertó a la policía no tiene desperdicio: "hemos visto lo que parece un niño conduciendo un Infinity gris, con lo que parece ser su madre detrás en un SUV rojo", comenta la mujer que llamó. "Era un buen conductor, para tener 10 años", comenta un testigo.
El pequeño llegó a salirse de la autopista, esquivando un bloqueo policial, y condujo durante varios metros por la hierba, hasta que los agentes lograron cortarle el paso y detenerle, no sin antes llevarse por delante una señal de tráfico. Los agentes fueron recibidos por el pequeño con escupitajos y patadas. Una joya.