Google no es la compañía que tome las decisiones más rápidas, sin embargo poco le ha hecho falta para fulminar de un plumazo iSex apenas una semana después de ser lanada, una aplicación pensada para "evitar denuncias falsas". En pleno juicio por la violación de los sanfermines, el abogado sevillano decidió lanzar iSex, una aplicación que te permitía "firmar" una suerte de contrato de consentimiento para mantener relaciones sexuales.

La aplicación funcionaba de forma muy simple, bastaba con introducir tu nombre y el de la otra persona y te permitía compartir el consentimiento por email o Bluetooth, registrando la posición por GPS, de forma que si alguien te acusaba de abusos, este "contrato" permitía servirte como la tarjeta de salir de la cárcel del Monopoly, si bien no está muy clara la validez legal que hubiera tenido.

Tampoco se contemplaba que, después de haber firmado el contrato si las circunstancias cambiaban, uno de los firmantes dejaba de querer y el otro decidía cometer la violación, sintiéndose legitimado por contrato.Tampoco hay que olvidar que en un acto violento como una violación no parece una gran complicación coger el móvil de la víctima y darse permiso en nombre de la persona violada. No se contemplaba la posibilidad de que pudiera haber consentimiento para determinadas prácticas y en cambio no para otras. Además, parar un momento para firmar un contrato de consentimiento tiene que cortar más el rollo que hacerlo para buscar los condones.

En definitiva, todo apuntaba a que la aplicación podía acabar "legitimando" o cuando menos dando una mayor seguridad al violador, que aunque finalmente no tuviera efectos legales podía hacer que se viniera arriba y que la experiencia de la víctima fuese todavía peor. En resumen, una muy mala idea ejecutada todavía peor.

Las redes sociales se levantan en armas contra iSex

 

La app se lanzó el pasado 11 de noviembre, y a lo largo de esta semana ha ido llamando la atención en redes sociales, evidentemente recibiendo duras críticas.

Desde las redes se organizó un movimiento para que los propios usuarios denunciasen la aplicación ante Google:

Y parece que ha funcionado, por suerte. El enlace que llevaba a la tienda es ahora un link roto y Play Store, con todos sus problemas, un lugar un poco mejor.