Vamos todos con una cámara en el bolsillo. En cualquier momento lo sacamos nos enfocamos el geto y tiramos una foto y a los cinco minutos, filtro de por medio, ya está rondando las redes sociales. Hace unos años si alguien te veía hacerte una autofoto te tomaría por chalado, hoy no solo es normal sino que igual se ponen a tu lado y se hacen su propio selfie.
El espíritu de una influencer de moda puede invadir a cualquiera y en cualquier momento. Quien no se haya hecho un selfie en los últimos diez años sencillamente no es persona. ¡Hasta mi abuela se ha hecho uno! ¡Ay, si el inventor hubiera registrado la idea! Un céntimo por selfie, y sería chorrimillonario.
Ahora, Paris Hilton ha decidido apropiarse de tal invención junto a la mismísima Britney Spears:
Obviamente, ni Paris Hilton ni Britney Spears han inventado absolutamente nada. Twitter no tuvo piedad a la hora de recordar selfies anteriores, muy anteriores a esa imagen tomada el 19 de noviembre de 2006. Por ejemplo, esta de Robert Cornelius que data de 1839 y que es uno de los primeros autorretratos de los que se tiene constancia. 170 años antes.
Y no es el único selfie ancestral:
Por no hablar de esta mítica escena de Thelma y Louise.
Hasta Bill Nye, con su pajarita y todo, se adelantó a las dos divas:
Hasta Paul McCarney
¡Incluso Van Goh!
De hecho, sería la primera vez que se inventa un término antes que el propio invento, ya que el primer uso documentado del palabro selfie data de 2002, Karl Kruszelnicki. Cuatro años antes de la foto de Britney.