La diversificación de productos nos ha llenado la cesta de la compra con tantas variedades que podríamos completar un carro solo con tipos de "pan de molde integral". Y espera, que eso solo en cuestión de variedades, imagina cuando se le suman los tamaños. Que si tamaño normal, familiar, "king size", ideal para parejas, para "singles"... Y el mini. Existen otros tamaños de producto intermedio en un intento de acaparar el máximo espectro de público posible, pero hoy nos quedaremos con el más pequeño, ese que despierta la ternura en cuanto lo ves en la estantería del súper.
Rodrigo Blanco dio con la clave de los productos mini: no solo están hechos para un solo uso, también son cuquis. A esta pasta de dientes dan ganas de adoptarla.
El tamaño más pequeño sirve para esos momentos en los que no necesitas más. Hay quien se comería un helado grande en pocos minutos, pero nos venden tamaños mini para que así no nos inflemos de calorías. Con una curiosidad: conforme las dimensiones del producto bajan, el precio medio de dicho producto sube. ¿Te apetecen unas patatas fritas? No te conformes con una bolsita, compra un kilo. Mejor de precio e ideal para ese maratón de series del fin de semana.
Hagamos un repaso por el supermercado. ¿Qué otros productos son tan adorables como esa pasta de dientes mini de Rodrigo? Veamos.
Agujeros de Filipinos
Si las galletitas redondas y bañadas en chocolate se comen solas, ¿por qué no vender los supuestos agujeros? Eso hizo Artiach: comercializó un tarro de cartón lleno de pequeñas bolitas de galleta balo retiró. Lástima, buenos estaban.
Mini Babybel
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Estos diminutos quesos de bola nos llevan acompañando desde 1977. La marca francesa Babybel, nacida en 1934, comercializaba quesos de tamaño pequeño, pero no fue hasta 1977 cuando creó el Mini Babybel tal y como lo conocemos. Adorable por fuera, delicioso por dentro y con un efecto colateral que el fabricante no esperaba: la cera con la que se recubre el queso es perfecta para hacer micro esculturas. Lo pequeño también puede ser arte.
Los micro refrescos del avión
Todo es pequeño en el avión, desde el espacio para meter las piernas a los refrescos que te sirven durante el vuelo. Dichos refrescos son de tamaño tan mini que a veces entran ganas de llevárselos de recuerdo en lugar de beberlos. ¿Será una estrategia para pedir una segunda bebida?
El tomate cherry
Apareció en nuestras vidas, y en las ensaladas, con ese entrañable tamaño mini a precio de tomate gourmet. Desde entonces se ha popularizado tanto, que resulta difícil escapar de estas bolitas rojas. Lo vemos en las ensaladas, sí, pero también en las guarniciones desplazando a las patatas fritas. Ahí ya no despierta tanto cariño.
Paquetes Mini de cereales
Pensados para ofrecer una ración completa de desayuno, estos mini paquetes de cereales son tan monos, que basta con verlos en un bufé libre de hotel para que te entren ganas de adoptarlos a todos. Copos de maíz, cereales bañados con chocolate, con más azúcar que un paquete de caramelos... Y hechos a escala de un paquete original, perfectos para colección. Son la solución perfecta cuando te levantas un domingo y no hay nada más que desayunar.
Los huevos de codorniz
Pequeños, adorables y perfectos para comer de un bocado cuando están cocidos, así son los huevos de codorniz. No son muy habituales en las dietas, de ahí que capten la atención en cuanto se ponen en la mesa.
¿Qué otros productos mini te han cautivado? ¿Sueles comprar este tipo de productos? El tamaño importa, sin duda.