Empezábamos el año conociendo la historia de Antonio, un vecino de Valencia de 63 años que buscaba un empleo para así “generar ingresos para subsistir”. A través de una carta, que fotocopió y distribuyó entre los buzones de su barrio, se ofrecía para todo tipo de tareas.
Una de las copias llegó hasta una usuaria de Twitter, que no dudó a la hora de compartir la misiva para intentar ayudar al hombre. Su mensaje fue retuiteado más de 12.000 veces y acumula más de 5.000 'me gusta'.
Pues bien, Antonio no solo ha encontrado un empleo, sino dos. En declaraciones a LOS40, el hombre ha explicado que se siente algo abrumado con la repercusión de su petición, pero que gracias a su difusión en las redes sociales ha conseguido trabajo.
Fue empresario y autónomo
“Estoy haciendo trabajos en las casas de un par de personas que vieron la carta en redes sociales”, asegura, relatando que hasta el momento “hacía trabajillos” pero que sus fondos se estaban agotando tras tener una “vida diversa” ejerciendo, entre otros, de empresario y autónomo.
Preguntado por la sorpresa de los tuiteros ante su buena caligrafía y ortografía, Antonio afirma que es mala señal que eso haya destacado y advierte que si eso ha llamado la atención es porque estamos acostumbrados a ver textos muy mal escritos.
El hombre espera seguir trabajando y confía en continuar siendo una persona anónima a pesar de haber sido el protagonista de uno de los primeros fenómenos virales del 2018 en nuestro país.