Cambiar los hábitos puede ser una gran forma de mejorar la calidad de vida. Perder peso puede hacer que tengas más energía, que duermas mejor y en general te aporta un bienestar superior. Pero hacerlo no siempre es fácil, hace falta constancia y disciplina. Por eso, hacerlo con compañía puede facilitar la tarea.
Eso es lo que decidió una pareja, pensando en mejorar su salud sin saber que estaban activando una maquinaria que enviaría su relación de 12 años directamente al pozo del olvido, tal y como ha explicado él en Reddit:
Me [31M] with my wife [32F] of 12 years, in 2017 we agreed to mutually lose weight for a myriad of reasons. I lost over 120lbs she gained 20. She says she's no longer attracted to me and wants a divorce. Is this relationship beyond saving? from r/relationships
Él tenía 31 años y ella 32. Levaban casados 12 años y en 2017 decidieron dar un giro a su vida. Ambos rondaban los 130 kilos y apenas podían caminar unos metros sin tener que parar. Básicamente su vida se reducía ir de casa al coche, del coche a la oficina, de la oficina al coche y del coche a su casa.
"No nos íbamos de vacaciones, no paseábamos, no hacíamos nada a parte de mirar nuestros teléfonos cuando íbamos a comer. Nuestra vida sexual era muy incómoda y esencialmente inexistente".
Así, el marido se bajó una aplicación para contar las calorías, se aseguraba que nunca sobrepasaba el límite y comenzó a dar paseos. Su mujer, sin embargo, lo pasaba peor. Tras cuatro meses, él comenzó a notar los efectos, cuando había perdido cuatro kilos. Fue entonces cuando ella comenzó a mostrarse hostil, haciendo que durmiera en la habitación de invitados -supuestamente por sus ronquidos- y básicamente se comunicaba con él por mensajes y correo.
También comenzó a publicar mensajes en Facebook en los que aseguraba que había perdido la batalla genética contra la obesidad y que había decidido cambiar el mundo, no su cuerpo. Pronto todo lo que ella hacía era ver Netflix y solo hablaban para hacer pedidos de UberEATS. Ahora él ha perdido casi 50 kilos mientras que ella ha ganado nueve.
Entonces recibió el mensaje definitivo: "Siento hacerte esto, pero no me atrae ni tu nuevo cuerpo ni tu nueva actitud. Nunca pensé que me recordarías a mis acosadores, y es exactamente en lo que te has convertido. Voy a llamar a un abogado matrimonialista el lunes por la mañana".