En Arabia Saudí las mujeres no tienen muchas de las libertades que deberían tener, no pueden vestir como les gustaría y ni siquiera pueden conducir. Sin embargo, a juzgar por este vídeo hay una cosa que sí pueden hacer: cursos de karate.
Los hechos ocurrieron en un restaurante llamado Abu Zaid en la ciudad de Yeda, una localidad cercana a la Meca. El cocinero, que visto lo visto podría participar en Pesadilla en la Cocina, tuvo que salir ante las protestas de una clienta enfadada, pero difícilmente estaba preparado para lo que se le venía encima, que fue inmortalizado por las cámaras de seguridad del local.
Cuando todavía estaba acercándose, tuvo que estar rápido de reflejos para esquivar un zapato tierra-aire (que te tiren un zapato es un insulto gravísimo en culturas de oriente medio, como pudo pudo comprobar George Bush en una de sus visitas a Irak, donde tuvo que esquivar un lanzamiento de calzado doble). Pero la cosa no había acabado ahí.
La enfadadísima clienta no se conformó en absoluto con eso y también le lanzó dos patadas voladoras que emocionarían al mismísimo Chuck Norris e intentó lanzar un uppercut directo a la mandíbula antes de ser separado por los empleados del local:
Toda una maestra del estilo de La Grulla, sin duda, Dani San no lo hubiera hecho mejor ni puliendo cera durante diez años.