Hay mucha gente ahí fuera que busca la viralidad. Un vídeo que salte de pantalla en pantalla, retuit a retuit, compartido a compartido. Un buen viral puede hacerte subir seguidores como la espuma y darte una visibilidad que te facilite mucho la vida -también puede arruinártela, ojo, o si no preguntad a los hipotecos fijos-. Así, muchos están dispuestos a mucho para tener su tuit de gloria.
James Moss, un británico afincado en Londres, quiso grabar un vídeo en el que se les veía a él y a un amigo bajar por las escaleras como si fuesen a darse un baño en el Támesis. El vídeo que tenían pensado no parecía tener mucho futuro como viral. Sin embargo, la ley de la gravedad quiso ponerle un poco más de salsa con una actuación estelar con un resbalón que tuvo hilarantes consecuencias.
Y es que la forma en la que cae hasta el agua es difícil de simular aunque seas Dani Alves. Su lenguaje corporal denota desesperación. Primero intenta aferrarse a su compañero, luego a las escaleras, pero la humedad, la gravedad y la aceleración de los cuerpos juegan en su contra. Gira la cabeza solo para ver cómo el agua se acerca cada vez más. La lentitud de la caída lo hace todo más risible, da tiempo de saborearla.
Un tuitero, siempre inquisitivo, comentó lo conveniente de que hubiera una cámara grabando, momento en el que explicó cuales eran sus intenciones originales.
"Queríamos hacer un vídeo del tipo "oh, mira, se van a bañar" y reírnos. Y entonces, el resbalón", explicó.
Así acabó todo, empapado:
Moraleja: si quieres falsear un vídeo viral, no lo hagas en una superficie mojada. Puede acabar siendo viral de verdad.