No todos los angloparlantes pronuncian como los presentadores de la BBC y eso es algo que todavía no hemos asimilado del todo. O sea, en nuestro idioma somos capaces de reconocer un sinfín de acentos, pero nos resulta llamativo que el resto de las lenguas también tengan sus matices respondiendo a una localización geográfica.
Este es el escollo que se ha encontrado Charlie Greer, un profesor de inglés que llegó a Jerez de la Frontera para enseñar en un colegio desde Carolina del Sur y en las redes sociales es conocido por Amerizano. Su acento, mucho más cerrado que el británico, sigue chocándole a sus alumnos, pero ahora ha dado con una explicación que parece la definitiva.
Para mis alumnos andaluces que se quejan de mi inglés cerrado, se titula el vídeo que está corriendo como la pólvora a través de las redes sociales, en el que explica el paralelismo entre su forma de hablar y la de sus alumnos: en ambos casos prima la economía del lenguaje.
De "bolawor" a "ancabuela"
Así, Greer explica haciendo gala de un sentido del humor inmejorable, que su inglés no es como el de Cambridge, pero que el español de sus alumnos tampoco se queda atrás, comentando la divertida historia de su alumna Gema:
Así que si los pequeños podían decir ancabuela (en casa de la abuela), él podría decir tranquilamente bolawor (bottle of water) porque "soy sureño, igual que vosotros". Una explicación sencilla y entrañable que además nos ha hech reír a carcajadas.