La venganza no tiene que ser un plato que se sirva frío, al contrario de lo que dice el refrán. De hecho, la de esta mujer de Kenia ha llegado en un momento bastante caliente o, al menos, eso es lo que han recogido varios medios del país.
Había averiguado que su marido le era infiel y decidió acudir a un brujo para ponerle algo parecido a dos velas negras, pero mucho más explícito. Así, tiempo después de haberse realizado el supuesto conjuro, el hombre quedaba enganchado a su amante en pleno acto sexual, teniendo que pedir ayuda.
Las imágenes del incidente muestran a una mujer gritando mientras la pareja está desnuda en la parte trasera de un vehículo, envueltos en una alfombra para taparse y rodeados de agentes de policía. Minutos antes, desde la habitación del hotel en el que estaban, habían pedido auxilio al personal.
Según el relato que recoge The Mirror, el hombre infiel vive junto a su mujer e hijos en Lodwai, pero viaja a Kitale por trabajo asiduamente. Su amante es la casera de su vivienda y fue su esposa la que se percató de que esta desaparecía cada vez que su marido tenía que desplazarse a trabajar a la otra localidad.
Se enfrentó a su marido, pero este lo negó. Aún así, la mujer recurió a la magia negra y, al parecer, podría haberle funcionado. Sin saber muy bien cómo, esta apareció en la comisaría poco después de que los amantes enganchados fueran conducidos allí.
Llegó acompañada del brujo que, según los informes, fue quien los separó. Las imágenes, publicadas en Facebook, muestran como el hechizador da vueltas a su alrededor dentro de un cuarto para lograr despegarlos.